Cómo ser un buen amigo — consejos de un psicólogo

Se habla mucho de la amistad, pero no todos saben cómo ser un buen amigo. Algunos ni siquiera saben dar una definición de amistad. Empecemos por esto. La amistad es una relación estrecha basada en la confianza y el respeto mutuos. La amistad se da entre personas con intereses comunes y simpatía mutua. Queremos ser amigos de la persona cuya visión del mundo se acerca a la nuestra. Y también surge la simpatía hacia la persona cuyas cualidades personales nos atraen. Analicemos con más detalle qué es la amistad.

Cuál es la diferencia entre un amigo de verdad y uno falso

Cuál es la diferencia entre un amigo de verdad y uno falso

Antes de pensar en cómo convertirse en un buen amigo, hay que determinar qué es una amistad sincera.

Signos de amistad sincera:

  1. Un amigo siempre está dispuesto a apoyarte, a ayudarte.
  2. Un amigo se alegra de tus éxitos y te apoya en tus esfuerzos. Sin embargo, al mismo tiempo, el amigo hará críticas constructivas si se lo pides, no te engañará ni se engañará a sí mismo.
  3. Tenéis vuestras propias bromas y vuestros propios temas de conversación. Todo lo que habláis queda entre vosotros. Sobre todo si se trata de secretos.
  4. En las reuniones os llenáis de energía mutuamente, vuestro humor mejora.
  5. En compañía de esta persona no te sientes en desventaja, superfluo, ofendido.
  6. Puedes ser tú mismo y saber que te aceptan y te quieren con todas sus ventajas e inconvenientes.

¿Cómo convertirse en el mejor amigo? Mantenerse en contacto, intentar comprenderse y aceptarse, acercarse cada vez más. En general, creo que ocurre por sí solo si una persona está realmente cerca de ti en espíritu.

Presta atención. Toda relación es un intercambio de energías. No sólo es importante elegir buenos amigos, sino también ser un buen amigo. Es decir, el intercambio de energía debe ser aproximadamente igual.

Por quién se siente atraída la gente

La gente se siente atraída por personalidades abiertas y amables. No te olvides de algo tan sencillo y valioso como una sonrisa. Si quieres que alguien se sienta a gusto, dale unos cuantos golpes psicológicos: una sonrisa, un cumplido, un elogio. Todo el mundo tiene necesidad de reconocimiento y aceptación. Con este comportamiento satisfaces estas necesidades.

¿Quién más atrae a la gente? Las personas fuertes, maduras e independientes. Los que son capaces de fijarse objetivos y alcanzarlos, saben lo que quieren, se aceptan a sí mismos y saben utilizar todos los rasgos de su carácter de forma competente atraen la atención y se disponen a sí mismos. Y también atraen los que saben reírse de sí mismos, sin complejos ni otros problemas psicológicos.

Cualidades necesarias para una buena amistad

Analicemos un poco más en detalle las cualidades que necesita una persona para una buena amistad.

Benevolencia

Benevolencia

La benevolencia es la capacidad de ver el bien en una persona. Una persona benevolente está abierta a nuevos conocidos, sabe apoyar y ayudar, destacar los méritos del adversario. Y también la benevolencia implica la capacidad y el deseo de ayudar desinteresadamente a los demás.

Paz

Es lo contrario del conflicto. Tenga en cuenta que no se trata de acallar las contradicciones, sino de la capacidad de comprometerse, escuchar y oír a la otra persona. Algunas personas son conflictivas por el mero hecho de serlo y buscan una excusa para «chocar» con alguien. Una persona pacífica hace todo lo posible para evitar los conflictos, por ejemplo, desactivar un ambiente tenso con una broma, comportarse con tacto y elegir las expresiones, buscando un enfoque único para cada persona.

Presta atención. Las personas pacíficas se reservan para sí mismas y para la otra persona el derecho a equivocarse, saben perdonar y disculparse.

Falta de egoísmo

Nadie quiere ser una herramienta en manos de otras personas. Y los egoístas sólo son amigos para eso: utilizan a los demás para satisfacer sus necesidades e intereses personales. Para ser un buen amigo, tienes que ser capaz de preocuparte y pensar no sólo en ti mismo, sino también en los demás. Es importante tener en cuenta los intereses, necesidades, deseos y experiencias de la otra persona.

Devoción

Devoción

Esto es lo que diferencia la amistad de otras relaciones. La lealtad es la capacidad de ser fiel incluso en periodos difíciles de la vida. Un buen amigo no se niega a ayudar, incluso cuando él mismo se siente mal. No abandona a una persona si ha hecho una mala acción o ha dicho algo precipitadamente. Un buen amigo lo entiende todo y se queda con su amigo hasta el final.

Qué hacer para ser un buen amigo — recomendaciones

¿Cómo convertirse en un buen amigo? Hemos determinado las principales cualidades necesarias para una buena amistad. Veamos algunos comportamientos más básicos de un buen amigo.

Aprende a escuchar

Saber escuchar

Aprende la técnica de la escucha activa. Su esencia es que no te limitas a escuchar lo que te dice la otra persona, sino que lo vives junto a ella. Intenta ponerte en su lugar, comprender su forma de pensar, ver el mundo a través de sus ojos. Si te pregunta algo, responde. Pero si no te pregunta, no te enzarces en consejos y valoraciones. A veces una persona sólo necesita hablar.

Además, es importante que en las reuniones no sólo hables de ti, sino que también te intereses por los asuntos de tu amigo. También es importante mantener el diálogo.

Cumpla sus promesas

Si no cumples tus promesas, no tiene sentido que pidas ayuda. Y pronto tus amigos se darán cuenta de ello. Y no sólo desaparecerán las peticiones y los llamamientos, sino también la confianza general en ti. Y junto con esto dejarás de ser valorado y respetado.

Si no estás seguro de poder cumplir una promesa, no la hagas. Por lo tanto, es importante no sólo ser ejecutivo, sino también aprender a evaluar sobriamente tus capacidades.

Reconoce tus errores

Para ser un buen amigo, tienes que poder hablar de todo en todo momento. No se puede guardar silencio sobre los problemas, fingir que no ha pasado nada o culpar a los demás. Esto acumula negatividad en la relación, lo que afecta no sólo a la relación en sí, sino también al bienestar físico y psicológico de cada uno de los participantes.

Aprende no sólo a admitir tus errores, sino también a disculparte. Y asegúrate de que tus disculpas no suenen a acusación. No traslades tu responsabilidad a otra persona.

No imponga su opinión

Si no te piden consejo o una evaluación, es mejor que guardes silencio. Si la persona está dispuesta a escuchar tu opinión, dilo todo tal como es, pero no impongas nada. Si el oponente está dispuesto a discutir y considerar alternativas, entonces puedes describir los argumentos, pero no puedes manipular, presionar con las emociones o «molestar» con hechos. ¿Te gustaría que alguien violara persistentemente tus límites personales e impusiera algo? No. A la otra persona tampoco le gusta.

Recuerda que los intereses comunes y la simpatía mutua no implican una completa unidad de opiniones, intereses, aficiones y puntos de vista. En algunos aspectos tú y tu amigo podéis ser completamente diferentes, y esto es normal. Sé tolerante, no tengas celos de una persona, no le exijas que renuncie a aquellas aficiones que no coinciden con las tuyas.

Es importante que pienses qué comportamiento de otra persona consideras aceptable en relación contigo mismo. Compórtate de la misma manera con él. Sólo así te convertirás en un buen amigo de tus amigos.

Guardar secretos

Éste es el núcleo de la amistad. A veces quieres compartir algo íntimo para aliviar la tensión interior. A quién contarle tu secreto, si no es a un amigo. Lo más importante — para que el amigo no resultó ser un traidor y no le dijo a todos el secreto. Recuerde que para contar los secretos de otras personas — es malo, bajo e indigno. Si una persona comparte contigo algo íntimo, significa que confía en ti como en sí mismo. Aprécialo.

No exijas nada a cambio

No exijas nada a cambio

La amistad, como cualquier relación, es un intercambio de energías, bienes y servicios. Sin embargo, esto no significa que sea necesario dejar constancia por escrito de quién gastó cuánto tiempo, dinero u otros recursos en quién. Los amigos se ayudan mutuamente con sinceridad. Sí, al ayudar, una persona está segura de que le será devuelto, de que en un momento difícil también puede recurrir a un amigo, pero no lo da por sentado.

Esta postura se refleja mejor en los regalos. No se debe dar algo a un amigo con la esperanza de un regalo recíproco o para pedir algo más tarde. Es indecoroso, después de aceptar un regalo, entrar en Internet y buscar su coste, con el fin de encontrar un regalo al mismo precio (en ningún caso más caro). Regala lo que quieras, lo que te salga del corazón. Y dalo cuando quieras, no cuando «tengas que hacerlo».

Mi experiencia

Tengo una amiga con la que llevamos en contacto desde el jardín de infancia, es decir, unos 23 años. Durante este tiempo han pasado todo tipo de cosas. En los años escolares durante algún tiempo incluso rompimos y nos fuimos a diferentes empresas, y luego empezamos a comunicarnos de nuevo. Observo que durante este tiempo nadie dijo cosas desagradables del otro, no reveló secretos. Al contrario, seguíamos diciendo cosas buenas del otro y defendiendo su nombre si era necesario. Por cierto, esta separación se produjo de algún modo sin problemas, es decir, sin escándalos, así como sin más reencuentros. Y ya no recuerdo por qué ocurrió.

En la escuela media y secundaria, nos comunicábamos muy estrechamente. Luego entramos en universidades distintas y viajamos a ciudades diferentes, pero seguimos en contacto. Ahora nos vemos poco, pero ocurre: ella viene a verme, yo vengo a verla. Y durante estos raros encuentros no tenemos la impresión de habernos convertido en extraños. Aunque cada una de nosotras tiene a alguien más cerca, cada una de nosotras ha cambiado, seguimos entendiéndonos, pidiéndonos apoyo o consejo.

Creo que, a pesar de todo, hemos seguido siendo los mejores amigos. Y se basa en esos recuerdos de infancia y adolescencia, secretos comunes, secretos y descubrimientos. Al fin y al cabo, los nuevos amigos, por muy cerca que estén de nosotros en espíritu, no conocen ni recuerdan a los antiguos, pero nos conocemos de toda la vida, nos hemos visto en todo tipo de «estados agregados».

Conclusión

Ahora ya sabes cómo ser un buen amigo. Recuerda que el criterio principal de la amistad es la comodidad. Si te parece que algo va mal en la relación, entonces no pienses así. Una amistad sana es una fuente de fuerza y crecimiento. Te ayuda a relajarte y a olvidar, además de motivarte y apoyarte. Si te sientes mal en una relación con alguien (no a veces o en raros momentos de contradicción, sino todo el tiempo), indica una relación destructiva y poco sana.

Fecha de actualización: 3-11-2022