Fijación de objetivos: qué es, ejemplos, etapas, métodos

La fijación de objetivos es el proceso de determinar un objetivo (principal) y una serie de tareas secundarias y objetivos intermedios, así como de encontrar la forma de alcanzar cada uno de ellos. Se trata de un elemento importante en cualquier ámbito de la vida, ya que sin la fijación de objetivos es imposible desarrollarse y avanzar. La autodeterminación de objetivos y su consecución hace que la vida sea consciente. Analicemos con más detalle qué es la fijación de objetivos en psicología y determinemos en qué esferas se utiliza: desglosemos brevemente la teoría.

Qué es la fijación de objetivos

Qué es la fijación de objetivos

¿Qué es la fijación de objetivos en palabras sencillas? Definamos el concepto de propósito y fijación de objetivos, caractericemos el proceso.

La fijación de objetivos es una elección consciente, que consiste en establecer un objetivo (tarea principal), señalar subtareas y buscar la manera de alcanzarlas. Un objetivo es un sujeto, un objeto, un estado, para cuya consecución una persona realiza esfuerzos volitivos. La base para elegir y alcanzar objetivos son las necesidades del individuo. Fijan la dirección del movimiento y determinan la motivación. Si sueñas con «algo» y piensas que lo conseguirás «de alguna manera» o lo harás «algún día», nunca lograrás lo que quieres. Sólo la concreción y la acción activa te harán una persona feliz.

La fijación de objetivos se considera en psicología, filosofía y ciencias sociales. Se define como un proceso de elección de ideas, medios, recursos y fijación de los límites de las desviaciones aceptables en la puesta en práctica de la idea elegida. Es un proceso continuo. ¿Por qué? Porque en el proceso de consecución del objetivo nacen nuevas ideas.

El esquema de fijación de objetivos incluye los siguientes bloques y niveles:

esquema de fijación de objetivos

¡Importante! En palabras sencillas, la fijación de objetivos es la determinación consciente por parte de una persona de qué, cuándo y cómo va a conseguirlo. No es sólo la elección de un objetivo, sino también el desarrollo de un plan paso a paso para su consecución.

Para ello es necesario

¿Para qué sirve fijarse objetivos? Sin la capacidad de fijar objetivos, es imposible alcanzar el éxito en la vida y en cada una de sus esferas: el trabajo, el estudio, el amor. La definición coherente de objetivos y su consecución ayuda a una persona a avanzar con confianza, conquistar nuevas cotas, mejorar la calidad y el nivel de vida. Una persona de éxito siempre sabe lo que quiere y cómo conseguirlo.

El que no tiene objetivos propios vive para los demás. Se vuelve impulsado, controlado. Da su tiempo y su energía a otras personas, contribuyendo a la consecución de sus objetivos. Las personas que saben fijar objetivos se convierten en líderes. Dirigen, no son dirigidos.

Presentemos en forma de tabla un análisis comparativo general de la organización consciente e inconsciente del proceso de fijación de objetivos según los criterios principales:

Fijación de objetivos consciente (eficaz, activa) Fijación de objetivos inconsciente (inconsciente, ineficaz)
Oportunidades de crecimiento Problemas, obstáculos, dificultades
Motivación consciente y análisis de oportunidades Motivación inconsciente y movimiento inconsciente
Imaginar un futuro ideal pero realista Imaginar un futuro ideal pero a menudo poco realista
Búsqueda de recursos y herramientas, desarrollo de nuevas pautas de comportamiento Repetir errores, seguir un patrón
Consecución controlada de objetivos y éxito Seguir la corriente y fracasar

Así pues, fijar objetivos aumenta la eficacia general de la vida y la productividad humana, ayuda a gestionar el tiempo y las actividades, desarrolla la conciencia y el pensamiento sistémico. Además, ayuda a encontrar el propósito y el sentido de la vida, alivia miedos y ansiedades.

Importante! En psicología se acostumbra a distinguir dos tipos de fijación de objetivos: activa (consciente) y pasiva (inconsciente).

En qué ámbitos se utiliza

fijación de objetivos en los negocios

Como ya hemos mencionado, la fijación de objetivos se demanda en todas las esferas de la vida. Consideremos algunas direcciones privadas, en las que la capacidad de fijar objetivos y alcanzarlos es la base del éxito:

  1. Pedagogía y psicología. Cualquier interacción sujeto-sujeto tiene un objetivo principal, subtareas y medios para su solución. Existen cientos de teorías psicológicas y pedagógicas, decenas de programas de formación y educación, miles de técnicas de formación, educación y corrección. No se puede prescindir de la planificación.
  2. El deporte. Los deportistas necesitan entrenarse para batir nuevos récords, para elevar cada vez más el listón personal de sus logros. Y esto es imposible sin la fijación de objetivos. Ayuda a desarrollar habilidades paso a paso, a elegir objetivos cada vez más complejos.
  3. La empresa. Quizá haya oído la frase de Steve Jobs de que no hay que trabajar 12 horas al día, sino con la cabeza. Lo que aquí se quiere decir es la importancia de fijar objetivos, planificar y analizar. ¿Dónde empieza un negocio? Con la fijación de objetivos de un proyecto, o más exactamente, con la elaboración de un plan de empresa. En primer lugar, una persona se fija un objetivo y, a continuación, piensa en los pasos que debe dar, las herramientas que debe conseguir, etc.
  4. Autodesarrollo. Deshacerse de los malos hábitos y desarrollar hábitos positivos, cambiar la forma de pensar, abandonar las actitudes destructivas, librarse de las ofensas y superar los traumas: esto y mucho más requiere la capacidad de fijar objetivos y alcanzarlos.

Además, la fijación de objetivos se utiliza a niveles superiores. Por ejemplo, en política y en cualquier ámbito en el que se trate de dirigir y gestionar personas. El conocimiento de los principios y fundamentos de la fijación de objetivos es importante para el estudio objetivo de la sociedad y la interacción con ella. Es importante conocer las regularidades del funcionamiento de la sociedad para fijar objetivos y organizar la fijación de objetivos. Los estudios sociales son una esfera de conocimiento que sirve de prototipo de la fijación de objetivos personales.

¡Interesante! No se puede prescindir de la fijación de objetivos en las relaciones con los amigos o en la esfera del amor. Sin embargo, en este caso no se trata tanto del trabajo individual, fijando y alcanzando objetivos personales, sino de trabajar juntos, eligiendo y alcanzando objetivos comunes.

Fundamentos

La base de la fijación de objetivos son los motivos y las necesidades del individuo. Consideremos ambos elementos con un poco más de detalle.

Una necesidad es una fuerte atracción hacia algo y un deseo de poseerlo, un sentimiento de malestar interior psicológico o físico debido a la carencia de algo. Las necesidades son básicas (fisiológicas) y espirituales. La transición a un nuevo nivel superior sólo es posible una vez satisfechas las necesidades del nivel anterior.

Existen 6 niveles de necesidades (según la pirámide de A. Maslow):

  • fisiológicas (comida, agua, sueño, sexo);
  • necesidades de seguridad (seguridad, confianza, estabilidad, comodidad);
  • necesidades sociales (comunicación, atención, cuidado, apoyo);
  • necesidades de respeto y reconocimiento (necesidad, significación);
  • necesidades creativas (creación, cognición, descubrimiento)
  • necesidades estéticas (amor, alegría, armonía, belleza)
  • necesidades espirituales (autorrealización, autorrealización, autodesarrollo y otros «yoes»).

Todos los objetivos que elegimos tienen que ver con estas necesidades.

Un motivo es un impulso interno que impulsa a la acción. Como metas elegimos lo que no sólo es significativo, relevante para nosotros en este momento, sino también lo que nos motiva a la actividad.

Los motivos son de distintos tipos:

  • internos (autosatisfacción) y externos (elogios de otras personas);
  • estables (relacionados con la visión del mundo, los valores y las necesidades de la persona) e inestables (relacionados con el entorno).
  • positivo (basado en sentimientos y emociones positivas) y negativo (basado en sentimientos y emociones negativas).

A veces, los motivos entran en conflicto entre sí. Esto complica la fijación de objetivos, pero al mismo tiempo ayuda a resolver el conflicto de motivos. En el proceso de elaboración de un plan y establecimiento de prioridades, la persona comprende qué es más importante para ella y qué motivo debe dejarse de lado.

Por separado, cabe mencionar los requisitos que deben cumplir los objetivos en la fijación de metas:

  • concreción
  • mensurabilidad
  • realidad
  • alcanzabilidad;
  • flexibilidad
  • verificabilidad;
  • transparencia;
  • falta de ambigüedad.

Esto también está relacionado con los fundamentos del sistema de fijación de objetivos.

Métodos de fijación de objetivos

Brian Tracy

Algunas personas (sobre todo las que oyen hablar de la fijación de objetivos por primera vez) no saben por dónde empezar. En realidad, es muy sencillo: la psicología ya ha ideado métodos universales de fijación de objetivos. Lo único que queda es utilizarlos.

Veamos algunos métodos populares de fijación de objetivos:

  1. SMART . Es una abreviatura de los nombres en inglés de los cinco elementos: specificity, measurability, achievability, relevance, time constraints. Es decir, determinas qué quieres conseguir y durante qué periodo, en qué medirás el resultado y a costa de qué alcanzarás el objetivo. Y también analizas en qué medida este objetivo se corresponde con tus verdaderos deseos y necesidades del momento.
  2. Método Brian Tracy. Escribe 10 objetivos para el año. Pero formule las frases como si ya hubiera alcanzado esos objetivos. Siente cada uno de ellos y elige uno que realmente cambie tu vida. Escríbelo en otra hoja y analiza sólo ese objetivo utilizando la técnica SMART
  3. Árbol de objetivos. De forma coherente, ordenada y visual en una hoja de papel, haz un «retrato» de tu objetivo en forma de árbol. Es decir, primero escriba o defina esquemáticamente el objetivo principal, a partir de él escriba las tareas del segundo nivel, a partir de ellas — las terceras, cuartas, etc. Al mismo tiempo, a cada objetivo y subtarea asigna inmediatamente los recursos necesarios para alcanzarlo.
  4. G. Método de Arkhangelsky. Esta técnica ayuda a planificar cuando las condiciones para alcanzar el objetivo cambian periódicamente. Es decir, el método ayuda a adaptarse al cambio de las condiciones externas y a pesar de todo ir hacia el objetivo. El proceso de fijación de objetivos según la técnica de Arkhangelsky implica definir el marco más allá del cual no se irá para alcanzar los objetivos. Se trata de los ámbitos, valores y prioridades con los que interactúa el objetivo. Tienes que formular el objetivo de modo que no entre en conflicto con tus valores y creencias vitales. Después, divide el objetivo en niveles de dificultad en lugar de subobjetivos, como en la técnica SMART. Además, define objetivos blandos y duros. Los primeros pueden alcanzarse en un periodo de tiempo determinado, mientras que los segundos pueden lograrse en un plazo estrictamente definido. Y, por supuesto, definir el plazo de realización del objetivo principal.
  5. Rueda de equilibrio. Dibuja un círculo y divídelo arbitrariamente por líneas en sectores. Un sector es una esfera de tu vida. Determina cuántos serán, cuáles son estas esferas. Evalúa tus logros en cada esfera en una escala de 10 puntos. Une todas las marcas con líneas y pinta la figura resultante. El campo libre en cada esfera es una zona para tu crecimiento y el establecimiento de objetivos.
  6. Mapas del intelecto. En una hoja de papel, haz un diagrama o dibujo donde definas el objetivo principal, y sobre su base fija los objetivos del segundo, tercer y siguientes niveles. Continúa dividiendo en niveles hasta que llegues a las tareas que se pueden hacer ahora mismo.

Estas son las técnicas universales, más populares y sencillas. Puedes encontrar y probar otras si lo deseas. Por ejemplo, el libro de Heidi Grant Halvorson «The Psychology of Achievement. How to Achieve Goals» presenta muchos ejercicios prácticos.

Etapas de la fijación de objetivos

Desglosemos las etapas y las reglas, o el proceso universal de fijación de objetivos:

  1. Identificar necesidades y motivos. Identifica lo que es valioso y significativo para ti, lo que te da fuerzas para avanzar con confianza. Fijarse un objetivo concreto.
  2. Elegir las técnicas de fijación de objetivos. Puedes probar todas las técnicas comentadas y adoptar la o las que mejor se adapten a ti.
  3. Pasar a elaborar un plan paso a paso para alcanzar tu objetivo y ponerlo en práctica.

Recuerda dejar siempre margen de maniobra. Esté preparado para hacer ajustes en el plan, mantenga en reserva algunas herramientas auxiliares, asigne un poco más de tiempo, energía y finanzas a la realización del objetivo. Así no habrá fracasos, dificultades o circunstancias imprevistas que te saquen de la rutina.

Errores comunes en la fijación de objetivos

Sin prioridades

Al abordar la fijación de objetivos, no cometa los errores de los demás (problemas de fijación de objetivos):

  1. Falta especificidad. No se definen los plazos o no se establecen las características cualitativas y cuantitativas de la medición de resultados.
  2. Objetivos poco realistas. Por ejemplo, si una persona se fija como objetivo perder 10 kg en una semana, es probable que fracase, y con ello la decepción consigo misma y con la vida en general. Pero perder 10 kg en dos meses es bastante realista. Fíjate objetivos realistas, no te crees condiciones para perder deliberadamente.
  3. No establecer prioridades. Aferrándose a todo a la vez, una persona, por regla general, no logra nada. Lo mismo ocurre cuando por error se confunde un objetivo no urgente y sin importancia con uno urgente e importante. Utilice la matriz de Eisenhower para establecer prioridades.
  4. No hay plan de trabajo. Dedicar una hora a elaborar un plan ahora le ahorrará horas en el futuro. El trabajo es más rápido y eficaz con un plan.
  5. Sin seguimiento ni análisis. La identificación y eliminación de errores, así como la corrección del plan en función de los cambios en las condiciones, aumentan la eficacia de todo el proceso.

La tecnología del establecimiento de objetivos es universal. Es como una fórmula matemática: sólo cambian los valores, es decir, los objetivos, los recursos, los motivos y los plazos.

Mi experiencia con la fijación de objetivos

En mi vida utilizo un algoritmo universal de fijación de objetivos:

  1. Elegir los objetivos principales.
  2. Determinar los recursos necesarios para alcanzarlos. Esto incluye mis conocimientos, habilidades, destrezas y capacidades. En la misma fase, desarrollo un plan para conseguir algunas herramientas, si aún no las tengo, pero potencialmente puedo adquirirlas.
  3. Encontrar motivación, desarrollar un sistema de recompensas y castigos. Llevar un diario me ayuda (basta con hacer pequeñas anotaciones sobre lo que ya se ha hecho). Es útil volver atrás y ver lo mucho que se ha conseguido e inspirarse en ello.
  4. Identificar problemas individuales y subobjetivos. Son pasos en el camino hacia la consecución del objetivo.
  5. Presentar el resultado. Esto también puede servir de motivación. Imagina cómo cambiará tu vida, qué ganarás cuando alcances tu objetivo. Si su transformación puede visualizarse de algún modo sobre el papel, hágalo. Por ejemplo, si tu objetivo es perder 10 kg, puedes editar tu foto en photoshop e imprimirla. O si quieres volver a tu peso en el pasado, puedes guardar una foto tuya antigua en un lugar destacado.
  6. Poner en práctica los planes. Esta es la etapa principal y más larga, en la que la motivación y el autocontrol te ayudarán.

En mi vida, sigo este plan. Por ejemplo, lo utilicé para perder peso. Entonces, un ejemplo de algoritmo de fijación de objetivos era el siguiente:

  • Primero determiné cuánto y en qué periodo de tiempo quería perder peso;
  • después decidí un plan de corrección (actividad física y nutrición adecuada);
  • Dividí estos elementos en tareas aún más pequeñas (por ejemplo, qué tipo de actividad, cuántas veces a la semana);
  • Definí las herramientas de control — en mi caso no era tanto la cifra de la báscula, como los volúmenes y la percepción subjetiva de mi reflejo en el espejo, aunque la cifra de la báscula estaba en mi mente (sin datos concretos, los objetivos no se fijan);
  • etc.

La eficacia de la fijación de objetivos depende de lo dispuesto que estés a controlar el proceso, a reconocer los errores y trabajar en ellos, a ajustar la estrategia en función de las condiciones cambiantes.

Conclusión

Establecer objetivos es necesario para que la vida de una persona esté llena de conciencia y felicidad. Sin objetivos, la persona va a la deriva. Se guía por los objetivos de otras personas y por impulsos personales inconscientes. Lo que hay a nivel subconsciente no siempre es útil para la propia persona. Si se guía por actitudes destructivas inconscientes, miedos, complejos y otros problemas, no podrá tener éxito en la vida ni ser feliz.

Fecha de actualización: 3-20-2022