Glosofobia (miedo escénico): cómo superar el miedo a hablar en público

La glosofobia es el miedo a hablar en público, el miedo escénico. Puede que tú también te hayas enfrentado alguna vez a esta fobia. ¿Recuerda cómo se siente? A menudo son latidos rápidos del corazón, respiración confusa, palmas sudorosas. Y algunas personas sienten que están a punto de desmayarse. ¿Qué hacer en estas situaciones? ¿Cómo calmarse y poder hablar?

Qué es la glosofobia

Qué es la glosofobia

La glosofobia es un trastorno mental asociado al miedo a hablar en público. Una persona tiene miedo a hablar delante de absolutamente cualquier número de oyentes. No importa si se trata del público de una gran sala o de un estrecho círculo de colegas. El miedo escénico es tan fuerte que provoca muchos síntomas desagradables de naturaleza mental y somática.

De lo contrario, la glosofobia se denomina peyrafobia. Junto al miedo escénico aparece otro trastorno: la logofobia. Se trata de una afección en la que una persona tiene miedo a hablar en general. Experimenta miedo a ciertas palabras o combinaciones de palabras.

¡Interesante! Según las estadísticas, alrededor del 95% de las personas se enfrentan al miedo a hablar en público (glosofobia) en diferentes situaciones.

En la mayoría de los casos, el «paciente» es un buen experto en su campo, sabe perfectamente qué y a quién tiene que decir. Pero el miedo escénico es tan grande que es como si estuviera paralizado. Todas las palabras se le escapan inmediatamente de la cabeza, no puede concentrarse. Debido a esto no sólo reduce la oportunidad de ascender en la escala de la carrera. Lo más desagradable es que disminuye la autoestima y la confianza en uno mismo.

Incluso los escolares sufren de glosofobia. Debido a ello, les resulta difícil aprobar créditos y exámenes, así como responder en las clases. Y ello a pesar de que siempre están preparados. Como consecuencia, el rendimiento académico baja considerablemente.

Cuál es el peligro del miedo escénico

Cuál es el peligro del miedo escénico

Una ligera excitación antes de hablar en público es bastante normal. Todo el mundo la experimenta. A veces tiene un efecto positivo. Recuerda cómo, debido a la excitación, intentaste concentrarte repitiendo una vez más el discurso. No hay nada malo en ello. Qué no se puede decir de la glosofobia.

El miedo patológico al escenario y a hablar en público parece inofensivo al principio. Esto es cierto en parte si el trabajo no requiere comunicarse con un gran número de personas al mismo tiempo. Pero en los casos en que una persona tiene que actuar a menudo, empiezan los problemas graves. Afectan a la salud mental y física.

En primer lugar, aparece el estrés. Le sigue una disminución de la autoestima, la aparición de complejos. Una persona que sufre de glosofobia, no cree en sus propias fuerzas, se encierra en sí misma. A veces intenta ahogar el miedo con bebidas alcohólicas, drogas u otras sustancias de acción fuerte. Pero éstas, como resulta después, no resuelven, sino que sólo agravan el problema.

Causas de la glosofobia

Causas de la glosofobia

Según los psicólogos, las causas de la aparición de la glosofobia pueden dividirse en dos grandes grupos:

  • genéticas;
  • sociales.

Para el primer grupo de razones que causan miedo escénico, incluyen el carácter, el temperamento, el aumento de la emotividad, la timidez, la astucia. Una persona tiene miedo de ser ridiculizado, rechazado. Para él, la condena inaceptable y el rechazo de los demás. Este es el principal problema. Una fobia aparentemente frívola con el tiempo se convierte en una condición patológica.

Entre los factores que provocan el desarrollo del miedo escénico se incluye la herencia. A menudo, los niños no sólo heredan los miedos de sus padres. Viendo su ejemplo, se comportan de la misma manera. Entre las causas del segundo grupo destaca especialmente la educación.

¿Qué puede provocar el desarrollo de la glosofobia y otros miedos similares? Hay varios factores:

  • excesivo rigor;
  • opresión;
  • castigo por hablar alto en público;
  • peticiones de silencio y discreción.

Todo esto hace que el niño empiece a temer la atención de los demás. Se vuelve inseguro, modesto, tímido. Ya en la edad adulta, estos niños tienden a apartarse de la masa general de la gente, no atraen la atención innecesaria, temerosos de que no les entiendan o juzguen.

El miedo escénico se desarrolla en los casos en que el niño es educado por padres perfeccionistas. Exigen que su hijo o hija sea el mejor en todo. Los niños intentan estar a la altura de las expectativas. Pero es imposible ser perfecto. Tarde o temprano, el niño se enfrentará a dificultades, fracasos y fracasos. Esto afectará enormemente a su autoestima.

Otra razón social para el desarrollo de la glosofobia es una mala experiencia de hablar en público en el pasado. Imaginemos, por ejemplo, a un escolar actuando en un escenario delante de sus compañeros y padres. Todo iba bien, pero de repente comete un error desafortunado que provoca risas y humillación por parte de los oyentes. ¿Cómo se sentiría usted en su lugar? Seguramente habrías sentido vergüenza, confusión y ofensa. O quizá habría abandonado el escenario.

Muchos adultos han vivido situaciones similares. El miedo a volver a ser ridiculizados y humillados les hace ser tímidos y avergonzados cuando tienen que hablar delante de un grupo de personas.

Y finalmente, la última razón para el desarrollo del miedo escénico y el miedo escénico son los problemas del habla. La glosofobia en este caso se denomina logoneurosis. Las personas que la padecen son felices comunicándose con amigos y familiares. Pero la comunicación con un público numeroso les produce estupor. Sobre todo tienen miedo al ridículo. Y a menudo este miedo está justificado, porque en nuestra sociedad hay personas intolerantes con tales defectos.

Síntomas de la glosofobia

Síntomas de la glosofobia

Los signos de glosofobia o miedo escénico están asociados a un cambio en el estado físico:

  1. El timbre de voz de la persona cambia.
  2. Los músculos están tensos y se siente rigidez.
  3. El corazón empieza a latir con más fuerza, hay una sensación de opresión en el pecho, falta de aliento.
  4. Aumenta la sudoración.
  5. Sus extremidades tiemblan, están frías. Se sienten débiles.
  6. Mareo o dolor de cabeza con miedo escénico. Aparecen náuseas.
  7. La persona no puede decir una palabra. Se le seca la boca.

En situaciones especialmente graves, los afectados de glosofobia se desmayan. Los niños pueden experimentar micción involuntaria. Es extremadamente raro, pero también ocurre en adultos.

Si los síntomas anteriores no se manifiestan con fuerza, pueden afrontarse por sí solos. Una persona será capaz de ordenar sus pensamientos, salir a escena, pronunciar un discurso. De lo contrario, abandonará precipitadamente la sala o perderá el conocimiento.

Cómo no tener miedo a hablar en público

Cómo no tener miedo a hablar en público

Hay muchas formas de superar rápidamente el miedo a hablar en público. Lo principal es no quedarse a medio camino, sino seguir tratando la fobia. También es importante poner en práctica los consejos aprendidos.

Prepárese a fondo

El tratamiento de la glosofobia comienza con la preparación del discurso. Investiga bien primero el tema y luego el discurso que vas a pronunciar. Piense también en el público al que se dirigirá. Saber lo que vas a decir y a quién se lo vas a decir es el primer paso para deshacerte de la glosofobia. Una buena preparación hará que tu discurso sea interesante y convincente. Y aunque algo salga mal, no te detendrás, no abandonarás el escenario. No tiene sentido, porque tienes un 100% de confianza en ti mismo.

Calma

Tranquilícese

Como ya hemos dicho, el miedo escénico que se origina en la mente tiene síntomas fisiológicos bastante tangibles. El público notará tus manos temblorosas y tu rigidez. Así que intenta calmarte. Piensa en las cosas buenas. Aparta de tu mente las expectativas negativas. Imagina mejor tus emociones a partir de un buen discurso. Esta es una de las formas más sencillas pero eficaces de superar el miedo a hablar en público.

Imagina lo peor

Imagínese lo peor

¿Las emociones positivas no te ayudan a superar el miedo? Entonces piensa en lo malo. Imagina que durante la actuación podría ocurrirte lo peor. ¿Imagínatelo? Analiza la situación. Te darás cuenta de que no da tanto miedo. Puedes relajarte.

Piensa en los resultados

Los pensamientos son materiales. Probablemente todo el mundo se ha dado cuenta de que las peores expectativas siempre se hacen realidad. Entonces, ¿por qué no pensar en las cosas buenas? Olvídate del miedo a hablar en público e imagina que lo has conseguido. Ten en cuenta todos los detalles: ejemplos visuales vívidos, la reacción del público, tu profesionalidad. Los pensamientos de éxito te ayudarán a crear un estado de ánimo positivo, te darán confianza en un buen resultado.

El mundo no gira a tu alrededor

El principal error de los oradores glosófobos es pensar que los oyentes están esperando el momento de reírse, humillar, insultar. Deshágase inmediatamente de este sentimiento. Centre su atención en los beneficios de su discurso. Mejor aún, piensa en cómo tus palabras ayudarán a tu audiencia a cambiar sus vidas.

Cuando las cosas no salen según lo previsto

Seguirán presentándose situaciones como ésta. ¿Cómo afrontarlas? Sigue actuando con confianza, al fin y al cabo conoces el material. Por ejemplo, si se te rompe el micrófono, habla más alto. No te preocupes, deja que el personal se ocupe de los problemas técnicos.

No se precipite

No se precipite. Hable con calma y mesura. Esto te ayudará a entender cuál es la mejor manera de hablar ante el público y qué ritmo de discurso elegir. El público también se acostumbrará a usted como orador.

Concéntrese en los primeros cinco minutos

Esta forma de superar el miedo a hablar en público es idéntica a la anterior. Sólo que aquí hay que imaginar que la actuación terminará en sólo cinco minutos. Haga todo lo posible para hacer frente a ellos. Y después, le resultará más fácil. Te acostumbrarás a tu papel de orador, a los oyentes, al entorno.

Nunca te disculpes por estar nervioso

Lo más probable es que puedas superar la excitación y actuar con honor. Parecerás relajado y seguro de ti mismo en el escenario. Deja que el público tenga esa impresión de ti. No les diga cómo se siente. De lo contrario, se distraerán del tema del discurso y prestarán atención a tu forma de hablar.

No debes hablar de los errores

Otra forma de deshacerse del miedo a hablar en público. Supongamos que te has preparado cuidadosamente, pero de repente cometes un error, se te escapa algo, te confundes. ¿Te ha pasado alguna vez? ¿Cómo se comportó después? Es mejor fingir que no ha pasado nada malo, que todo va según lo previsto. Los oyentes no tienen por qué enterarse de tus meteduras de pata. De lo contrario, se centrarán en buscar otros fallos. No les interesará lo que tengas que decir.

Llega pronto

Para superar el miedo escénico o la glosofobia, la puntualidad puede ayudar. Llegue pronto. Acostúmbrate al lugar donde tendrá lugar la representación. Sitúate en el escenario, visualiza cómo va a ir todo. Esto le ayudará a calmarse.

Haz ejercicio

Deshacerse del miedo a hablar en público le ayudará a mantenerse físicamente activo. La excitación excesiva trae consigo una sensación de rigidez en los músculos y los movimientos. Puedes superarlo con un ejercicio ligero 15 minutos antes de la actuación. Haz 2-3 ejercicios sencillos y te olvidarás de la tensión.

Respire

Como ya hemos dicho, el miedo a hablar en público se manifiesta en una respiración acelerada. Debido a ella, tu cuerpo experimenta una falta de oxígeno, lo que a su vez provoca una pérdida de autocontrol. Para evitarlo, respira hondo justo antes de subir al escenario.

Compruébelo todo dos veces

Compruébelo todo dos veces

Si necesitas un cuaderno, algún documento o apuntes, revísalos varias veces. Es poco probable que aumente tu confianza tener que correr detrás de ellos durante una actuación. Para superar el miedo a este tipo de situaciones te ayudará una cuidadosa preparación. Apréndete el texto para poder seguir hablando en cualquier circunstancia.

Consejo

Para superar el miedo escénico, no debe intentar controlar la ansiedad antes de hablar en público. Estará ansioso de todos modos. Es mejor concentrarse en lo que se quiere transmitir al público. En unos minutos te olvidarás de la glosofobia, ganarás confianza en ti mismo y podrás mostrarte como un orador experimentado.

Ejercicios para superar el miedo

Tres sencillos ejercicios le ayudarán a superar el miedo escénico.

Actividad física

Actividad física

Un simple calentamiento calmará el sistema nervioso y aumentará la producción de hormonas antiestrés: las endorfinas. Pero no se le ocurra hacer ejercicios justo antes de salir al escenario. De lo contrario, aparecerá ante el público sonrojado, despeinado, con la respiración confusa. Es poco probable que un orador así inspire confianza. ¿No es así?

Visualización

En la lucha contra la glosofobia ayuda la visualización. Imagina exactamente cómo será la presentación. No te pierdas ni un solo detalle. Piensa en tus sentimientos, en cómo reaccionará el público a tus palabras.

Los psicólogos recomiendan imaginar escenarios de éxito. Por ejemplo, cómo responderás a las preguntas más peliagudas de los oyentes o cómo saldrás airoso de situaciones de fuerza mayor.

Autoimaginación

Autohipnosis

Un ejercicio bastante eficaz para superar el miedo a hablar en público. Inmediatamente antes de dirigirte al público debes decir las siguientes frases:

  1. Me alegro de estar aquí.
  2. Me alegro de estar aquí con el público.
  3. Tengo confianza en mi discurso.
  4. Soy bueno en lo que quiero decir.
  5. Me gusta toda esta gente.
  6. Le gusto al público.

Unas pocas expresiones te tranquilizarán, te ayudarán a relajarte, a no centrarte en tus sentimientos sino en el objetivo del discurso.

Conclusión

Para deshacerte de la glosofobia, la fobia asociada al miedo escénico, puedes hacer muchas cosas. Pero recuerda que el 90% del éxito depende de la preparación. Incluso antes de la actuación, estudia bien el material, domina las habilidades para hablar en público, aprende a comunicarte con la gente. No pienses en cosas malas. Es mejor concentrarse en cómo beneficiar a los oyentes. Deshacerse del miedo a hablar en público está en tus manos.

Fecha de actualización: 11-16-2023