La terapia de cuentos de hadas es una rama de la psicología que puede considerarse un «tratamiento con cuentos de hadas». Ayuda a identificar y resolver problemas psicológicos internos de adultos y niños. Pero a pesar de su sencillez y la suavidad de su impacto, la terapia de cuentos de hadas tiene sus propias peculiaridades y matices de uso.
Tabla
- Qué es la terapia de cuentos de hadas
- Objetivos de la terapia de cuentos
- Direcciones de la terapia de cuentos
- 4 principios de la terapia de cuentos
- Funciones de la terapia de cuentos
- Tipos de cuentos
- Métodos de terapia con cuentos de hadas
- A partir de qué edad aplicar la terapia de cuentos de hadas
- Ejemplos de cuentos
- Qué problemas pueden resolverse con la terapia de cuentos
- Mi consejo a los padres
- Conclusión
Qué es la terapia de cuentos de hadas
La terapia de cuentos de hadas es un método de influencia psicológica sobre una persona a través de los cuentos de hadas. Con su ayuda se pueden corregir diversos problemas, deshacerse de miedos y complejos, adquirir una nueva experiencia de comportamiento.
Esta técnica puede aplicarse no sólo a los niños, sino también a los adultos. Todo depende del contenido del cuento y de sus recursos metafóricos. Pero para los niños en edad preescolar, la terapia con cuentos de hadas es más importante, porque todas las imágenes de los héroes se almacenan en el subconsciente del bebé. El uso eficaz de los cuentos de hadas a esta edad ayudará al niño a evitar muchos problemas y a encontrar su lugar en la sociedad.
Objetivos de la terapia de cuentos
La terapia con cuentos de hadas ayuda al niño a prestar atención a un problema concreto y a encontrar formas de resolverlo de forma discreta. Cada cuento de hadas tiene su propia situación que surge en la vida del niño, y los personajes tienen las mismas cualidades que él mismo. El cuento siempre tiene una conclusión lógica, que muestra una posible salida de la situación.
La terapia con cuentos de hadas como método de corrección psicológica asume como objetivo el establecimiento de una conexión entre los acontecimientos de los cuentos y la vida real, así como la adquisición de nuevas experiencias emocionales y de comportamiento.
Un cuento de hadas no sólo puede enseñar algo, sino también curar, aliviar la ansiedad y la tensión. Lo principal es que se desarrolle de forma confiada y no moralizante.
Direcciones de la terapia de cuentos
Hay varias direcciones de la terapia de cuentos de hadas:
- salir de diversas situaciones de la vida a través de la elección del comportamiento del héroe del cuento, que conduce a diversas consecuencias;
- definición y solución del problema del niño de una forma accesible para él
- transmisión de la experiencia vital y la sabiduría mundana a través de la trama de un cuento de hadas;
- desarrollo del pensamiento, la imaginación y la memoria al comentar la obra y analizar las acciones y los personajes de los héroes;
- Corrección del comportamiento relacionándose con el protagonista, identificando sus acciones negativas y sus rasgos de personalidad;
- psicoprofilaxis de posibles problemas.
4 principios de la terapia de cuentos
Cuando se utiliza la terapia de los cuentos de hadas, deben respetarse sus 4 principios fundamentales.
Principio del valor
El cuento de hadas debe transmitir al niño o al adulto los valores básicos de la vida, que deben ser respetados. La conversación tras la lectura de la obra debe ayudar a comprender conceptos como la amistad, el amor, el apoyo mutuo, la compasión, la fe, la bondad, la actitud humana, la autoestima.
El principio de vitalidad
Adherirse a los valores fundamentales correctos no es fácil si uno no siente su propia fuerza interior. A muchas personas les cuesta decidirse a actuar debido a sus problemas, miedos y dudas. La terapia de los cuentos de hadas ayuda a superarlos y a experimentar la propia vitalidad.
El principio de la versatilidad
Los cuentos de hadas no siempre son sólo positivos, el psicólogo debe ayudar al niño a ver también personajes negativos con sus motivos de comportamiento. Esto les permite darse cuenta de que cualquier acto siempre tiene dos caras y, por tanto, siempre hay aspectos positivos en uno malo.
El principio de las dos realidades
Cualquier mundo de cuento de hadas debe estar conectado con la realidad, influyendo en ella de algún modo. El terapeuta debe trabajar la parte del cuento de hadas con el niño de tal manera que entreteja los hallazgos con la vida y la experiencia reales del niño.
Funciones de la terapia de cuentos
La terapia de cuentos es una herramienta para influir en el niño, que puede ser utilizada incluso por los padres. Su uso puede ayudar a deshacerse de las fobias infantiles, a comprender lo que es «bueno» y lo que es «malo», a ayudar a superar las dificultades de la vida.
Entre las funciones de la terapia de cuentos se incluyen las siguientes
- establecer rápidamente el contacto con el niño
- revelar problemas mentales que se ocultan en el subconsciente;
- consideración de distintas variantes de comportamiento a partir del ejemplo del héroe del cuento;
- ayudar al niño a comprender sus propios sentimientos, emociones y contradicciones de comportamiento;
- aclaración de información que el niño no comunica deliberadamente.
Tipos de cuentos
La psicóloga T.D.Zinkevich-Evstigneeva estudió la terapia de los cuentos de hadas y elaboró una clasificación de los mismos.
Artísticos
Se trata de cuentos de hadas tradicionales (populares y de autor), que por su argumento pueden corregir el comportamiento del niño. Por ejemplo, estos cuentos de hadas pueden utilizarse para explicar cómo puede resultar la malcriadez excesiva («El cuento del pescador y el pez»).
Si la trama lo permite, el especialista puede adaptar y cambiar el cuento a la situación requerida. Pero este tipo de cuentos no se utilizan para resolver problemas profundos y complejos.
Psicocorrectivos
Este tipo de cuentos se utiliza para corregir rasgos individuales de la personalidad: pereza, agresividad, capricho, cobardía y otros. Es adecuado no sólo para niños pequeños, sino también para adolescentes y adultos. No requiere obligatoriamente discutir y jugar, a veces basta con leerlo y pensar en él.
Psicoterapéutico
Es el tipo de cuentos más utilizado por los niños en edad preescolar. Ayudan a comprender los fenómenos y acontecimientos del mundo circundante, que afectan al desarrollo de la personalidad del niño. Con la ayuda de los cuentos psicoterapéuticos, puede deshacerse de los problemas internos más profundos (por ejemplo, el miedo a la oscuridad, a las tormentas, etc.). Se desarrollan y componen para un niño en particular.
Meditativos
Estos cuentos ayudan a aliviar tensiones y tienen un efecto relajante. Obras en las que no hay negatividad ni maldad, ayudan a superar problemas de adaptación social y estados de ánimo depresivos. A veces se utilizan para identificar problemas que perturban al paciente a nivel subconsciente. La narración meditativa se combina bien con música agradable o sonidos de la naturaleza.
Didáctico
Los cuentos didácticos resuelven una amplia gama de tareas educativas y de crianza. Se utilizan en guarderías y escuelas para facilitar la presentación del material educativo. Por ello, en la actualidad existen decenas de programas de desarrollo correccional de autor basados en la terapia de los cuentos de hadas.
Métodos de terapia con cuentos de hadas
El trabajo con cuentos de hadas permite una amplia variedad de combinaciones con otras formas de terapia. Esto ayuda a reforzar el interés de los niños, a provocar una actitud positiva estable ante este tipo de clases.
- Terapia con arena. La interacción con la arena no sólo produce un efecto relajante, sino que también ayuda a recrear su propio mundo de «arena» de cuento de hadas. Esta práctica permite al niño sumergirse por completo en la historia y encontrar intuitivamente una salida a una situación difícil.
- Dibujar. El niño crea con ayuda de lápices y colores su propio mundo, lo que le ayuda a aprender emociones sobre el texto escuchado. Esta técnica también fomenta la autoexpresión creativa de los niños. Puedes proponerles que continúen un cuento de hadas en una hoja de papel o que inventen un final alternativo.
- Dramatización. Representar un papel en un cuento de hadas da al niño la oportunidad de adquirir experiencia emocional y una comprensión más profunda del personaje. Pero es importante dejar espacio para la improvisación: esta forma de terapia permitirá al niño ver sus propios defectos y problemas en el ejemplo del héroe del cuento.
- Espectáculos de marionetas. A veces es difícil representar uno mismo un papel, y entonces las marionetas vienen al rescate. El niño puede asignar cualquier cualidad a su personaje y observar desde fuera a qué pueden conducir las distintas variantes de comportamiento. El propio proceso de hacer marionetas y jugar tiene un efecto relajante.
- «Maestro de cuentos». Se trata de un método de terapia de cuentos de hadas de autor, que se lleva a cabo con una baraja de cartas especiales. T.D.Zinkevich-Evstigneeva cree que existen 10 arquetipos (camino, estado, encrucijada, etc.), cuya combinación permite crear 50 tramas de cuentos de hadas diferentes. El niño inventa de forma autónoma su propia historia basándose en el mapa elegido.
A partir de qué edad aplicar la terapia de cuentos de hadas
La terapia de los cuentos puede utilizarse a cualquier edad de los niños: desde preescolares hasta adolescentes. A la hora de utilizarla, hay que tener en cuenta las peculiaridades de la edad y las actitudes valorativas necesarias.
Para niños en edad preescolar
En la edad preescolar, la terapia de los cuentos es una parte obligatoria del proceso educativo. Es la forma más fácil de que los niños adquieran los conocimientos y habilidades necesarios. Los niños desarrollan su imaginación, atención, memoria y habla, aprenden a volver a contar y explicar el significado de lo que leen los adultos, a distinguir entre los rasgos malos y buenos de los personajes.
Además de las tareas educativas, la terapia con cuentos de hadas resuelve una serie de tareas psicológicas.
En 2-3 años, los cuentos ayudan al niño a adaptarse a la guardería, a reducir la ansiedad debida a las nuevas condiciones y a la ausencia de los padres cerca.
En 3-4 años, esta terapia ayuda a establecer la comunicación con compañeros y adultos y a desarrollar el habla.
A la edad de 5-6 años, los niños muestran los primeros miedos y complejos, por lo que el propósito de la terapia de cuentos de hadas en esta etapa es superar diversos problemas y la confianza en sí mismos.
Para los escolares más pequeños
Con la entrada en la escuela, los niños tienen aún más tareas, lo que ayuda a resolver el método de la terapia de cuentos de hadas. Los cuentos populares y de autor ayudan a adaptarse a las condiciones y órdenes escolares. Los niños siguen desarrollando la memoria, la imaginación y la atención, y aprenden a fijarse objetivos.
A esta edad es más difícil utilizar los cuentos como método colectivo de terapia, porque la personalidad de cada niño se está desarrollando, haciéndose más compleja y diferente de la de sus compañeros. Por lo tanto, los psicólogos trabajan más con los niños de forma individual (sobre todo cuando trabajan con conductas desviadas).
Para adolescentes
En los difíciles años de la adolescencia, la terapia narrativa puede ser una buena herramienta de autoexpresión. Con la ayuda de diversas obras, los adolescentes pueden reflexionar, controlar sus emociones y reacciones ante las acciones y pensamientos de los personajes, e identificarse con ellos. Esto ayuda a encontrar su «yo» y a trabajar diversos problemas de autoestima, inseguridad, superación de pensamientos negativos, etc.
Ejemplos de cuentos
La terapia de cuentos utiliza cuentos infantiles adecuados a la edad del niño y a sus objetivos. Mejor aún si no se trata de un cuento ya preparado, sino de uno inventado durante el proceso terapéutico.
Para los niños en edad preescolar y primaria, hay que elegir obras que tengan un argumento claro:
- cotidiano («Kasha del hacha», «Kolobok», «Kurochka Ryaba», etc.);
- mágicos («El Gato con Botas», «Morozko», «La Montaña de Cristal», etc.);
- instructivos («Juguetes de Fedina», «El pez dorado», «Fedorino Gore», «El hombre y el oso», etc.)
- heroicos («Sivka la tormenta», «Ilya Muromets», etc.).
Puntos importantes a los que prestar atención al seleccionar o inventar un cuento de hadas:
- El niño debe interesarse por los personajes, los mejores son los compañeros o los animales.
- Los personajes deben tener cualidades positivas o negativas pronunciadas: sólo así el niño podrá analizar su carácter y sus acciones.
- El tema del cuento debe ser relevante. Debe seleccionarse en el momento actual, a tiempo para resolver los problemas de los niños (miedos, timidez, agresividad, etc.).
- La obra debe terminar necesariamente con un desenlace, para que el niño sepa concretamente cómo actuar o no actuar.
Estructura de la clase
Una sesión de terapia de cuentos suele organizarse siguiendo la siguiente secuencia:
- Inmersión en la clase. Puede ser cualquier ritual que ayude a captar el estado de ánimo necesario (escuchar música, mirar un dibujo, etc.).
- Lectura del texto. Es mejor que el texto lo lea un adulto, pero también se puede escuchar una grabación de audio del orador.
- Hablar de lo que se ha oído. En esta fase, el niño comenta las acciones de los personajes, su relación con los acontecimientos, así como los sentimientos y emociones que le ha evocado el cuento.
- Técnicas arte-terapéuticas. Reflejo de los personajes y del mundo del cuento en las actividades preferidas (dibujo, juego en la arena, dramatización, etc.).
- Salida del cuento. Otro ritual que simbolice la vuelta a la realidad.
- Resultado de la clase. Una conversación sobre lo que el niño ha aprendido de la lección y cómo le será útil en la vida.
Es aceptable que no se utilicen todos los elementos de la estructura de la lección, algunos pueden omitirse o intercambiarse.
Qué problemas pueden resolverse con la terapia de cuentos
La terapia de cuentos es uno de los mejores métodos para influir suavemente en un niño que tiene problemas de desarrollo y crianza. Algunos de los más comunes son:
- capricho, fastidiosidad, negativa a comer, dormir, procedimientos de agua;
- descuido, dejadez, negativa a mantener sus cosas limpias y en orden;
- agresividad, mala actitud hacia otros niños;
- timidez, inseguridad, timidez.
Mi consejo a los padres
- Es mejor que un adulto cuente una historia en lugar de leerla. Así será posible seguir las reacciones del niño.
- El niño debe poder elegir el cuento que quiere leer. Si alguna le interesa más que otras, es que encuentra en ella algo importante para él.
- No utilices un tono moralizante al hablar de la historia, el niño debe tomar el significado que esté a su alcance.
- En los cuentos de hadas mágicos no es deseable introducir cambios relacionados con la realidad moderna. Esto puede dificultar la inmersión en el mundo mágico.
- Deje que el niño fantasee y háganlo juntos. El cuento resultante puede decir mucho sobre su mundo interior.
Conclusión
La terapia con cuentos de hadas es una forma suave y eficaz de influir en el bebé, que ayuda a resolver los problemas más graves. Pero es importante elegir cuidadosamente un material que se adapte al estado interior y al comportamiento del niño. A pesar de su sencillez, el método de la terapia de cuentos de hadas es muy eficaz, porque se basa en un material cercano incluso al niño más pequeño de preescolar.
Fecha de publicación: 3-23-2022
Fecha de actualización: 3-23-2022