Para qué sirve la comunicación

No todo el mundo admite que depende de la comunicación. Para que una persona esté en sociedad es una necesidad vital. Por qué una persona necesita comunicarse, cuál es su significado y utilidad. Por qué es tan importante para una persona la necesidad de relacionarse con otras personas. Qué problemas pueden surgir con la falta de comunicación y cómo evitarlos. Todas estas preguntas serán respondidas en el artículo.

Por qué es necesario comunicarse

Un hecho poco conocido: si una persona está aislada de la sociedad durante mucho tiempo, empezará a degradarse. Aparecerán cambios en su psique. El hombre es una criatura de manada, y normalmente no podemos vivir y desarrollarnos sin comunicación e interacción.

Los psicólogos entienden la comunicación como interacción con la ayuda de palabras, gestos, posición corporal, mímica, expresiones faciales. Para una persona es muy importante tener gente como ella a su alrededor

¿Por qué es tan importante la comunicación?

1. La persona recibe de los demás la confirmación de su «yo». Se produce la identificación del individuo. Esto no parece significativo para la mente consciente, pero es muy importante para la mente subconsciente. Miramos a los demás como espejos y ellos nos muestran quiénes somos.
2. La comunicación nos permite compararnos con los demás. Obtenemos una valoración de nuestras cualidades, acciones y obras. Así es como una persona se pone límites a sí misma: barreras morales.
3. Recibimos aprobación, simpatía y apoyo como confirmación de que nuestros sentimientos son correctos y están justificados. Cuando otros como nosotros nos dicen que sintieron lo mismo en esa situación, resulta más fácil sobrevivir a la situación estresante.
4. Una persona experimenta alegría cuando comparte sus sentimientos con los demás. La alegría no es completa si no hay nadie a tu alrededor que se alegre por ti. Y la pena en soledad es aún más difícil de sobrevivir. Esto también es una propiedad de la psique: consultar, compartir.

Por eso la comunicación es importante para el hombre. Gracias a ella, no se pierde. Se orienta hacia los demás, se compara con ellos. Así se crean sociedades de personas, donde no es costumbre matar, humillar. La gente construye una vida pacífica, conveniente para la mayoría. Personalidades asociales hay y siempre ha habido, pero son más bien una excepción, que sólo confirma la regla. Para ellos en nuestra sociedad hay instituciones correccionales especiales: consultorios de psicólogos, psiquiatras, cárceles.

Si la gente viviera aislada, sin comunicarse entre sí, tendríamos un mundo parecido a un manicomio. Una persona no puede estar mentalmente sana si está aislada durante largos periodos de tiempo. Piensa en Robinson Crusoe: hablaba con la pelota. Si no lo hubiera hecho, se habría vuelto loco.

Comprensión mutua en la comunicación

Este es quizás el fundamento que se encuentra en la superficie. La comprensión mutua es lo que la gente considera el principal beneficio de la comunicación. Por eso una persona se comunica: siente que los demás le entienden. Se da cuenta de que si los demás actúan y sienten de la misma manera, entonces tiene razón.

No es posible llegar a un entendimiento mutuo con todas las personas. En ello influyen muchos factores.

Por ejemplo, los diferentes temperamentos: si un melancólico solloza a tres torrentes, un colérico sólo se enfadará y condenará tal reacción.

Otro ejemplo: las diferentes condiciones de vida. Cuando un pobre pierde su cartera, se percibe mucho más duramente que si le ocurre a un rico.

Dicen: «El hambriento no es compañero del hambriento». Y es cierto. Si una chica soltera llega tarde a una cita y se lo cuenta a su amiga casada, no entenderá la profundidad de su decepción.

La inteligencia también influye. Las personas a las que les gusta especular sobre cosas profundas, el universo, discutir sobre temas elevados, no podrán hacerlo con personas de una estructura mental diferente. Así, un candidato a filósofo no tendrá nada de qué hablar con su compañero de clase, al que sólo le interesan los bolsos de moda y las últimas noticias. Mucha gente lo ha sentido en sus propias carnes: no todos los compañeros de clase han sido capaces de encontrar un lenguaje común. Es que cada uno es diferente. Y sin comprensión mutua la relación no funcionará.

Si el marido sueña con un coche chulo y viajar en una compañía divertida, y la mujer quiere muchos hijos y una casa, esa pareja no durará mucho. La comprensión mutua es la coincidencia de puntos de vista, pensamientos y preferencias. En eso consiste la comunicación. Sobre esta base se establece el contacto. Tales personas se convierten en amigos.

Los beneficios de la comunicación

No todas las personas tienen amigos. Ocurre: hay personas a las que les cuesta acostumbrarse a los demás, que son muy diferentes de quienes les rodean. También hay quienes simplemente no tienen ganas de socializar o no encuentran tiempo para acercarse a los demás. Para estas personas en situación de estrés se recomiendan las consultas de los psicoterapeutas. Para eso sirve la socialización en el ser humano: para curar.

Aunque no tengas un amigo en quien confiar, hablar de tus problemas y recibir apoyo, la comunicación es esencial para la psique. Cuando una persona no confía en los demás, se lo guarda todo dentro, los problemas se acumulan. Así surgen pinzamientos musculares en el cuerpo, que pueden provocar cualquier enfermedad, excepto, quizá, la sífilis. Como escribió un escritor satírico: «Todas las enfermedades las provocan los nervios, sólo la sífilis la provoca el placer».

Si se habla del problema, éste puede resolverse total o parcialmente. En cualquier caso, se produce una descarga. Los beneficios de la comunicación para las personas son inestimables. Como tal descarga los psicólogos aconsejan llevar un diario personal. Pero es mucho más eficaz encontrar apoyo en la persona del interlocutor.

Conocimientos y experiencia

¿Por qué necesita comunicarse el hombre? La respuesta corta es para intercambiar información. Aporta conocimiento y experiencia. Además de nuestra propia experiencia, aprendemos de la experiencia de los demás. Y, en contra de la creencia popular, podemos aprender de los niños, no sólo de los mayores. A través del contacto con otras personas adquirimos nuevos conocimientos sobre todo. Esto contribuye al desarrollo personal. Nuestro entorno influye mucho en nosotros y nos forma como personas. Por eso, los padres suelen preocuparse por sus hijos, que eligen a sus amigos entre la categoría de los abusones. ¿Qué pueden enseñarle al niño?

Pero esta opinión es controvertida. Cualquier persona tiene una serie de cualidades. E incluso los psicópatas tienen algo que aprender. Todo depende de la persona: nosotros mismos decidimos qué «tomar» de los demás. Al fin y al cabo, incluso las personas educadas y con buena reputación pueden aprender cosas malas. Por ejemplo, la arrogancia. Y los matones pueden enseñarte a defenderte. Pueden explicarte que no puedes dejar a un amigo en apuros, mostrarte lo que es el valor. Todas las personas sin excepción son iguales en este sentido. Y en todos hay una virtud y un lado negativo. Por eso una persona necesita comunicación: al entrar en contacto con distintas personas, elegimos qué rasgos adoptar. Pero en cualquier caso adquirimos conocimientos y experiencia vital.

Una forma de ver las cosas

¿Por qué necesitamos comunicarnos? Las personas no siempre sabemos exactamente cómo actuar en una situación determinada. A menudo damos por sentados deseos y actuamos por motivos equivocados. La comunicación ayuda a ver el problema desde otro ángulo. Una persona empieza a entender mejor una situación cuando habla con alguien sobre ella. La experiencia de los demás nos permite corregir nuestros actos y no cometer errores. Esto es lo que la comunicación aporta a una persona. A menos, claro está, que la persona sea lo suficientemente inteligente como para escuchar a los demás.

Ayuda y apoyo

La comunicación nos permite prestar ayuda no sólo moral a nuestros seres queridos. Si cuentas tus problemas a personas muy cercanas, te ayudarán a resolver el problema. Así, a través de la comunicación, una persona encuentra ayudantes. Un viejo refrán ruso dice: «No tengas cien rublos, pero ten cien amigos». La gente ayuda a sus amigos y a cambio espera la misma ayuda. Esto se llama reciprocidad. Es propia de las relaciones amistosas, porque no elegimos a nuestros parientes y no siempre resultan ser similares a nosotros en su visión de la vida. Por supuesto, la ley tácita prescribe que los parientes siempre deben ayudarse mutuamente, pero no todo el mundo lo hace. Y los amigos son personas que no se deben nada. Suelen ser personas con las que se puede contar.

La capacidad de empatizar: empatía

Empatía es un término que significa capacidad de empatizar. Los empáticos son personas que asumen como propia la angustia ajena. En esencia, es una carga pesada, pero aquí no podemos elegir. La empatía no es un hábito aprendido, sino un rasgo innato, como el temperamento y el carácter.

Los empáticos son grandes conversadores, buenos amigos. Siempre ayudan, porque también sienten el dolor que les ha tocado compartir a sus seres queridos. Esta virtud no siempre es buena, especialmente para los propios empáticos. Experimentan muchas veces más que otras personas.

Cómo detectar a un empático.

• Llora cuando ve una película.
• Arrastra animales callejeros al piso.
• Sabe escuchar.
• Ayuda con algo más que consejos.
• Es receptivo.
• A menudo se preocupa por nada.

Estas personas son profundamente sensibles. Son grandes amigos. Y ésta es otra razón para comunicarse: simpatizarás, te sentirás aliviado cuando alguien experimente sentimientos idénticos, al oír hablar de tu problema. La empatía es inherente a todo ser humano, pero en distintos grados. Por regla general, los amigos muestran empatía entre sí.

Reflexividad en la comunicación

Una característica muy importante de la comunicación es que a través de ella nos dedicamos, entre otras cosas, al autoconocimiento. Tu interlocutor puede prestar atención a cómo piensas, a cómo percibes determinadas situaciones. Esto le permite conocerse mejor, comprender cómo piensa. Esto se llama reflexión. Sin comunicación, la reflexión es unilateral. Y eso dificulta la objetividad.

La comunicación desde el punto de vista de la psicología

Los psicólogos han establecido desde hace tiempo que las personas retraídas que no tienen amigos y se comunican poco, se vuelven asociales. Esto amenaza con la aparición de problemas psicológicos. Algunas personas se obsesionan consigo mismas y con sus estados. Así aparece la hipocondría. Hoy en día este problema es muy común. Otras personas no comparten sus experiencias, se lo guardan todo para sí mismas. Sienten el peso de la soledad y se vuelven groseros, insensibles.

Es la comunicación lo que hace que las personas sean humanas. Es el mecanismo más importante, es inherente al hombre por naturaleza. Y la gente no debe olvidarlo. Sí, es posible sin comunicación. Pero con el tiempo dejará su huella en la psique. Mientras que en la comunicación la persona se cura.

El papel de la comunicación

Resumamos lo anterior y enumeremos las principales posiciones de la comunicación en la vida humana.

• Autoconocimiento.
• Obtención de conocimientos.
• Ayuda y apoyo.
• Capacidad de evaluar la situación de forma global, contando con la opinión del oponente.
• Empatía.
• Defensa.
• Identificación de la personalidad.
• Autoestima.
• Liberación psicológica.

Todo esto lo recibe una persona a través de la comunicación.

Condiciones de la comunicación

Existe una cierta carta de interacciones de los individuos. Es característico que los compañeros saluden con una inclinación de cabeza, intercambien sonrisas, gestos para expresar aprobación. Son tipos de comunicación no verbal. La mirada, la posición del cuerpo, la expresión facial. Los amantes pueden comunicarse sin abrir la boca. Los íntimos hace tiempo que aprendieron a entenderse sin palabras.

Hay otras condiciones. Es costumbre que los amigos y parientes se llamen por teléfono. La condición para comunicarse con extraños es el respeto. Nos dirigimos a nuestros mayores por «usted». Nos dirigimos a una persona mayor por su nombre y patronímico. Esta condición se llama subordinación. Es costumbre que los jóvenes intercambien apretones de manos especiales, que salten a la espalda de los demás. Incluso una palmada en la espalda puede servir como forma de comunicación. Y la forma depende de las condiciones: lo cerca que estén las personas, cómo sea habitual que interactúen. Aquí influyen la educación, la cultura y la socialización.

Etapas de la comunicación

• contacto visual (las personas se ven)
• saludo (las personas anuncian con gestos o palabras que se han visto);
• intercambio de cortesías (llamémoslas convenciones)

En este punto, la conversación puede terminar con una frase que indique el deseo de poner fin a la interacción. «Vale, tengo que irme», «Hasta luego, hola a tu mujer». Si las personas tienen temas en común, se discuten y entonces la conversación pasa a la fase final.

• Fin de la conversación.

Estructura de la comunicación

Distinguimos tres categorías de comunicación

• comunicativa;
• interactiva;
• perceptiva.

La comunicación es una forma de transmitir información mediante palabras. Es un diálogo. La comunicación interactiva es una acción conjunta. Perceptiva: percepción mutua. Los tres componentes son un todo y no existen por separado.

Funciones de la comunicación

La interacción de los individuos tiene varias funciones.

• Transmisión de información.
• Autoconocimiento en la comunicación intrapersonal.
• Obtención de ventajas, beneficios.
• Comunicación secular, que no conlleva beneficio informativo: la gente habla de temas generalmente aceptados.
• Posibilidad de autoafirmación.
• Influencia sobre el adversario, manipulación.

Tipos de comunicación

Existe una división en variedades de comunicación.

• Primitiva — los objetos no se benefician, sólo intercambian cumplidos.
• Formal — una forma de saludo impuesta por la sociedad a partir de frases sin sentido.
• Rol — subordinación, la gente acepta sus roles asignados y realizar rituales de comunicación.
• Espiritual: un profundo conocimiento mutuo. Suele darse entre amigos o amantes.
• Secular — limitación por frases generales.
• Manipulativa — comunicación con el fin de obtener un beneficio, influir en una persona o situación.

Qué ayuda a la gente a comunicarse

La comunicación se basa en señales verbales y no verbales. La gente siempre capta la subestimación en un nivel subconsciente. Por ejemplo, si una persona está irritada, pero no lo demuestra de ninguna manera, el adversario puede reconocerlo por los gestos: brazos cruzados, mirar hacia otro lado, aleteo nasal. Pero esto ocurre a nivel subconsciente, una persona no analiza el comportamiento y los gestos de su interlocutor — lo hace su cerebro, enviando señales al subconsciente. La gente lo llama sexto sentido, cuando un empleado se da cuenta de repente de que ahora no merece la pena pedir la baja, aunque el jefe no le haya dado motivos para pensarlo. El cerebro ya ha escaneado su comportamiento y ha enviado una señal.

No son sólo las palabras las que ayudan a la gente a comunicarse. La comunicación se produce a nivel de miradas, gestos, posición corporal. Un psicólogo experimentado calculará inmediatamente cuál de las parejas del café está peleada y cuál es feliz. Las personas que se quieren, se miran de forma juguetona y se miran con los hombros completamente girados.

Conclusión

La comunicación es la necesidad humana más importante. Le es necesaria a nivel psicológico, consciente y subconsciente. Esta es la estructura de nuestra psique: sin comunicación, una persona pierde el contacto con el mundo, se pierde a sí mismo, se vuelve salvaje. Es por esta razón que los psicólogos llaman conversación con el alma — el mejor remedio para el estrés y la depresión. Comunicarse, contactar con los seres queridos, hacer nuevas amistades: todo el mundo lo necesita para su salud psicológica.

Fecha de publicación: 11-16-2023

Fecha de actualización: 11-16-2023

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