El síndrome FOMO se ha dado en distintos momentos y épocas, aunque no se habló oficialmente de él hasta finales del siglo pasado. Y no es de extrañar, porque siempre hay gente cuya vida es, al menos en algún ámbito, mejor que la nuestra. Y si alguien no presta atención a esto, hay quien experimenta el estrés más real y cae en la depresión. ¿Por qué ocurre esto? ¿Cómo podemos dejar de lamentarnos por lo que no tenemos y aprender a disfrutar de la vida?
Tabla
FOMO — qué es
El síndrome FOMO en psicología es el síndrome de la oportunidad perdida o LOS. El término proviene del inglés de la expresión fear of missing out. Literalmente significa miedo a perderse algo importante o interesante. Y no estamos hablando de un concierto muy esperado o de alguna noticia. FOMO toca sentimientos más profundos.
El FOMO es la preocupación incesante de que la vida pasa de largo, de que no eres partícipe de los acontecimientos de tus amigos y conocidos. Por eso intentas estar en contacto con ellos todo el tiempo, viendo las noticias en las redes sociales. Al mismo tiempo, no dejas la sensación de que ellos viven más plenamente, más vívidamente que tú. Y este sentimiento va acompañado no sólo de envidia, sino también de una disminución de la autoestima.
El efecto FOMO no sólo afecta al ocio, a los viajes y a salir con los amigos. También afecta a las relaciones personales y familiares, la promoción profesional, la consecución de objetivos, la realización de habilidades y talentos, etc. Ver a alguien cumplir sus sueños es un golpe especialmente fuerte que incapacita y desmoraliza.
¡¡¡Interesante!!! La palabra «FOMO» entró en la jerga de los psicólogos gracias al experto en marketing estratégico Dan Herman en 1996. Sin embargo, la gente tenía sentimientos similares antes, hace docenas o incluso cientos de años. Sólo que se han acentuado en nuestra época de tecnología digital e Internet.
Un poco de números
Según una investigación realizada por científicos estadounidenses, entre 40 y 47 personas de cada 100 han experimentado FOMO al menos una vez en su vida. Y la mayoría son hombres.
La socióloga Samantha Murphy aportó otros datos. En su opinión, más de la mitad, es decir, el 56% de todos los habitantes del planeta padecen el síndrome del lucro cesante.
Signos y síntomas
Como cualquier otro trastorno, el síndrome del lucro cesante tiene sus síntomas característicos:
- La persona siente malestar en el momento en que no tiene el móvil en las manos o cerca.
- Hay un fuerte deseo de recibir la aprobación de absolutamente todo el mundo a su alrededor, aunque sean completos desconocidos.
- Deseo de estar siempre en contacto, de no perderse una llamada, un mensaje, la próxima noticia.
- Miedo a perderse algo importante, por ejemplo, un acontecimiento significativo para todos.
- Un deseo obsesivo y a veces doloroso de estar absolutamente en todas partes. Hablamos de fiestas, conciertos, reuniones amistosas y otros acontecimientos similares.
- Un deseo irresistible de desplazarse incesantemente por las noticias de las redes sociales.
- Uso frecuente de la frase «todos menos yo».
Curiosamente, muchos psicólogos consideran que el FOMO es algo parecido a un mecanismo de defensa psicológico. Para ellos, el sentimiento de parentesco y asociación con los demás es una de las principales necesidades de todo ser humano. Si no se satisface, surgen diversos trastornos mentales. Y el síndrome del beneficio perdido protege la psique en los casos en que un individuo durante un largo periodo de tiempo no recibe satisfacción sobre su vida.
Prueba
Por lo tanto, lo que es FOMO, se entiende. ¿Cómo determinar si usted tiene este síndrome en sí mismo? Responda con sinceridad a las siguientes preguntas:
- Siempre tengo miedo de perderme algo importante, no sólo el acontecimiento en sí, sino también noticias sobre él.
- Me siento incómodo si no tengo mi smartphone cerca.
- Para mí es importante que la gente que me rodea me apruebe a mí y a mi vida.
- Corro a mi teléfono en cuanto oigo una señal de notificación.
- Siempre llevo mi aparato conmigo, vaya donde vaya o esté donde esté.
- Me asusta no poder responder a tiempo a un mensaje, ver una noticia.
- Siempre, aunque no sea necesario, busco noticias en las redes sociales.
- Me molesta y me molesta que mis amigos vayan a algún sitio sin mí.
- Tengo un fuerte deseo de asistir a absolutamente todos los eventos.
Si ha respondido afirmativamente a más del 50% de las preguntas, padece el síndrome del beneficio perdido.
Impacto de las nuevas tecnologías en el desarrollo del FOMO
Como ya se ha dicho, con el desarrollo de la tecnología, los SMS son cada vez más comunes. Y no es de extrañar, porque la gente no necesita dedicar mucho tiempo y esfuerzo para estar siempre en línea, para observar la vida de los demás. Basta con pulsar un par de botones y ya se está en línea, hojeando el siguiente lote de noticias.
Las nuevas oportunidades han convertido a la gente en verdaderos adictos a Internet El resultado son los trastornos de ansiedad. Una persona que pasa la mayor parte del tiempo conectada se da cuenta de la inutilidad de esta actividad. Pero sus amigos y conocidos, según le parece, están ocupados en cosas más útiles.
En un intento de remediar la situación, los que sufren FOMO cuelgan fotos en las redes sociales de cómo han pasado el fin de semana. Y no les importa que estas imágenes estén retocadas con photoshop o acompañadas de historias falsas. Lo principal es causar impresión. Aquí es donde empieza el círculo vicioso. Suscriptores aleatorios o amigos, al ver una foto bonita, también experimentan envidia, complejo de inferioridad y otras emociones desagradables. Y entonces aparece el FOMO tras ellos. Este hecho, por cierto, es utilizado a menudo por los creadores de las redes sociales, tratando de atraer a más usuarios.
Retrato de un problema
Está claro que el FOMO se manifiesta de forma diferente en cada individuo. Pero hay una serie de rasgos y características comunes a todos los que sufren FOMO.
Así, según las investigaciones, el miedo a perderse algo importante no tiene preferencias de género ni de edad. Afecta absolutamente a todo el mundo: hombres, mujeres, jóvenes y personas de mediana edad. Lo único que puede decirse a este respecto es que la intensidad de la manifestación del trastorno disminuye con el tiempo.
La manifestación más fuerte del SUV se produce por las tardes, al final del día (después del trabajo o los estudios), al final de la semana laboral. Es durante estos periodos cuando la gente suele descansar, reunirse con amigos y divertirse. Pero también ocurre que los síntomas desagradables persisten a lo largo del día.
Otro punto interesante se refiere a la relación entre la intensidad de los síntomas de FOMO y los rasgos de personalidad de una persona. Para realizar el estudio, los científicos utilizaron un modelo de cinco factores de la personalidad, según el cual cada individuo se considera a la luz de cinco características:
- Extraversión;
- benevolencia;
- Conciencia;
- neuroticismo;
- apertura a la experiencia.
Cada uno de ellos puede manifestarse en mayor o menor grado. Según los resultados, un alto nivel de extraversión o, por ejemplo, de neuroticismo no tiene ningún efecto sobre el desarrollo o no del FOMO. De esto podemos concluir que ni los rasgos de personalidad ni el temperamento desempeñan un papel en este proceso.
Consecuencias
El FOMO siempre tiene un impacto devastador. La sensación de estar perdiéndose algo en la vida conduce al desarrollo de estrés, que en algún momento se convierte en crónico. Y el estrés, a su vez, afecta negativamente no sólo a la salud mental y emocional, sino también al bienestar general. La persona se siente cansada, su capacidad de trabajo disminuye, aparece el insomnio.
Si hablamos globalmente, el síndrome del lucro cesante priva del sentimiento de satisfacción con la vida, no permite cubrir las necesidades básicas, a causa de lo cual se desarrolla la depresión. Esta condición puede compararse con un gusano en una manzana. La falta de voluntad de no perderse nada día tras día «mina» a la persona, poblando su cabeza de pensamientos extremadamente desagradables. Al principio lamenta la imposibilidad de asistir a absolutamente todas las tertulias y eventos de ocio, y luego se da cuenta de que toda la vida le está pasando de largo. Y en este momento sólo está mirando las noticias.
Cómo deshacerse del síndrome FOMO
Lo más importante es reconocer que tienes un problema y que el FOMO se basa en engaños e ilusiones. La mayoría de las veces, la vida que ves en las redes sociales simplemente no existe.
Piensa también en esto: ¿cuánto tiempo llevas viendo fotos de tu amigo o conocido cocinando la cena, haciendo cosas en el trabajo, sentado en una cola en la clínica? Las redes sociales están diseñadas para mostrar sólo los momentos más bonitos de tu vida, el lado desagradable de la misma permanece detrás de la cortina.
Hay otras recomendaciones.
Establece reglas para el uso del smartphone
He aquí algunos ejemplos:
- Borra aquellas aplicaciones que no utilices. Y también apague las notificaciones si no son especialmente necesarias.
- A menos que un grupo o comunidad tenga información importante para ti, date de baja de ellos. No atasques tu cerebro con información.
- Revisa tu bandeja de entrada en busca de correos innecesarios.
- No mires las noticias más de dos veces al día, por ejemplo, por la mañana y por la noche.
- No te lleves el smartphone a la cama.
- Si es posible, haz un plan detallado de cuándo accederás a las redes sociales y responderás a los mensajes. Esto se aplica a la correspondencia que no esté relacionada con el trabajo.
Por supuesto, al principio no te resultará fácil. Pero tras unos días de práctica, verás que tu dependencia del smartphone se va debilitando poco a poco.
Date cuenta de que no puedes intentarlo todo
No tendrás suficiente energía ni dinero para hacerlo todo. Así que piénsalo: ¿realmente lo necesitas todo? ¿Qué te gusta y qué te gusta más? Es hora de elegir.
Concéntrate en lo que te produce verdadero placer. No persigas lo que necesitan los demás. Céntrate en tus deseos y preferencias. Sólo así podrás disfrutar de verdad de la vida.
Por la noche, después del trabajo o los estudios, anota 5 cosas que te hayan aportado hoy las redes sociales. Sólo deben ser necesariamente útiles. Al cabo de unos días, quedará claro que hay muy poca información importante y realmente necesaria. Con un poco más de tiempo te sorprenderás de haber dedicado tanta atención al lugar equivocado.
Elija la comunicación en directo
Imagina que estás en el trabajo. En cuanto sientas el impulso de navegar por las noticias, pregunta a un compañero que esté cerca en ese momento. Incluso un diálogo sin sentido te evitará perder el tiempo.
Acostúmbrese a hablar con su familia todos los días sobre su jornada. Que sea un diálogo en el que muestres un gran interés y una participación activa.
Si no puedes comunicarte con tu familia a diario, expresa tus pensamientos por escrito. Anota los momentos agradables, registra los logros, planifica el día siguiente.
Si nada funciona y sigues sintiéndote adicto a las redes sociales, no dudes en pedir ayuda a un psicólogo.
No te olvides de la gratitud
Una forma bastante eficaz de combatir el FOMO. No pierdas el tiempo preocupándote por lo que te puedes estar perdiendo. Más bien, piense en lo que puede agradecer. Los psicólogos recomiendan anotar de 10 a 20 de esas cosas en un cuaderno cada día. Que sea la salud, la disponibilidad laboral, los amigos leales, tu casa, los gadgets, etc. ¡Concéntrate en las cosas buenas!
Mi experiencia
No puedo decir que antes sintiera muchos celos de los que vivían mejor que yo, iban a fiestas, participaban en eventos diversos, etc. Pero a veces sí aparecía la sensación de que la vida me pasaba por encima. Y sí, me pasaba después de ver fotos bonitas de famosos en las redes sociales. Me di cuenta de que la mayoría de ellas tenían que trabajar duro y con perseverancia para conseguir lo que querían. Pero el hecho es que tenían algo que yo no tenía.
Lo que me ayudó a deshacerme por completo del FOMO inicial fue el método de la gratitud. Me di cuenta de que conseguir mis objetivos y deseos dependía únicamente de mí y de mis esfuerzos. Así que tengo que aprender a disfrutar de lo que tengo ahora, porque es lo que he podido conseguir «con mis propias manos». Y si quiero conseguir algo más, algo que tienen otras personas, tengo que fijarme un objetivo y desarrollar un plan para lograrlo.
Es mucho más fácil vivir así, porque te das cuenta de que tu vida depende de ti. Es una especie de motivación para desarrollarse y avanzar.
Conclusión
¿Qué significa FOMO? Es el síndrome de la oportunidad perdida que resulta de una gran dependencia de las redes sociales. Se trata de un círculo vicioso. Miras las hermosas vidas de los que te rodean, te deprimes porque las cosas no te van bien y experimentas mucho estrés. Sientes que la vida pasa de largo. Y al mismo tiempo te das cuenta de que a menudo es sólo una imagen que nada tiene que ver con la realidad. No pierdas un tiempo precioso en esos pensamientos. Fija tus objetivos, consigue que se cumplan tus deseos. Alégrate incluso de los logros más pequeños. Y limita también el tiempo que dedicas a ver las noticias. Todo esto te garantizará tranquilidad y alegría.
Fecha de publicación: 3-12-2022
Fecha de actualización: 3-12-2022