Sólo unos segundos bastan para crear una primera impresión de una persona. Eso dicen los psicólogos. Y durante este tiempo puedes establecerte como una persona agradable que se preocupa por sus interlocutores. No importa lo inesperado que pueda parecer, pero en la práctica es más fácil darse cuenta de todo. Pero, ¿cómo? ¿Cómo mostrar tu mejor cara en un momento?
Tabla
- Aspectos psicológicos básicos para causar buena impresión a la gente
- Formas probadas de causar una buena impresión a alguien
- Mostrar simpatía y confianza en uno mismo
- No armes jaleo
- Sonría
- Establecer contacto visual
- Vestir de forma adecuada a la situación
- Mostrar sentido del humor
- Hacer que una persona se interese
- Dé a la gente la oportunidad de hablar de sí misma
- Encuentre puntos en común
- Sea usted mismo
- No presuma
- No se olvide del nombre
- Consejos importantes
- Mi experiencia
- Conclusión
Aspectos psicológicos básicos para causar buena impresión a la gente
Imagine que se encuentra en una empresa desconocida. ¿Cuál es la primera impresión en este caso? Es lo que la gente de allí pensará de usted. Se formará en unos 7 segundos. Y será así no sólo en una fiesta o, por ejemplo, en una cita, sino también en reuniones de negocios. Existe incluso la opinión de que es imposible causar una primera impresión una segunda vez. Por eso hay que aprovechar al máximo los segundos asignados. Pero no siempre funciona como uno quiere, porque hay una serie de factores que interfieren. Veamos algunos de ellos:
- Vergüenza. Aquí es importante entender que la torpeza y la vergüenza son experimentadas por casi todas las personas que se introducen en una sociedad desconocida. Una vez que te des cuenta, te resultará más fácil.
- Antes de conocer a alguien, muchas personas se plantean la siguiente pregunta: ¿qué beneficio les reportará esta relación? La pregunta es fundamentalmente errónea. Es mejor pensar en lo que puedes hacer por el nuevo conocido o conocidos. Mientras estés pensando en la gente que te rodea, no tendrás tiempo para la timidez y la inseguridad.
- Malinterpretar el lenguaje corporal. Por supuesto, no todo el mundo lo trata bien. Pero aun así, no se puede negar su papel. Ya con los primeros gestos y expresiones faciales puedes entender lo que el interlocutor siente por ti.
- Ropa que no te queda bien. ¿Qué es lo primero que piensas cuando los zapatos te aprietan demasiado y la falda no te queda bien? Desde luego, no en la persona que tienes delante. La incomodidad no sólo te impedirá concentrarte, sino que además te provocará inseguridad. Así que ponte aquello con lo que te sientas más cómodo.
Otro factor que impide dejar una buena primera impresión es la incapacidad para establecer contacto. Recuerde que una sonrisa abierta y sincera, una postura erguida y una mirada directa a los ojos siempre inspiran confianza y ganas de conocer mejor a alguien.
Formas probadas de causar una buena impresión a alguien
Entonces, ¿cómo causar una buena impresión en el interlocutor, teniendo en cuenta que no hay mucho tiempo para hacerlo? Los psicólogos identifican una serie de formas eficaces. Veámoslas en detalle.
Mostrar simpatía y confianza en uno mismo
Estas cualidades atraen inconscientemente a los demás. Simplemente están seguros de que con una persona amable y segura de sí misma es mucho más fácil comunicarse que con otra. Por lo tanto, sea abierto, entre audazmente en contacto con desconocidos, muestre iniciativa y sonría. Si eres adulto, no pasa nada si extiendes la mano para dar un apretón. Para los adolescentes, probablemente sea una forma inadecuada de conocerse, así que basta con intentar entablar conversación.
No armes jaleo
Relájate y adopta una postura cómoda. Si está de pie, coloque las manos a lo largo del cuerpo; si está sentado, póngaselas en el regazo. No muestre excitación frotándose un bolígrafo o una servilleta en las manos, tocándose el pelo o mordiéndose las uñas sin cesar. Pero, al mismo tiempo, no intentes parecer demasiado seguro de ti mismo. Esto puede resultar alienante, mostrándote como una persona fanfarrona y arrogante. Sé tú mismo. Deja que tu personalidad «hable».
Sonría
Esta es probablemente una de las formas más eficaces de causar una buena primera impresión. Sobre todo si es la primera vez que te encuentras con una persona. Este consejo no implica una sonrisa de Hollywood con 32 dientes. Es mejor que sea educada y amable, además de natural. Créame, la gente se da cuenta enseguida de la falta de sinceridad y la falsedad.
Científicos británicos han llegado a una conclusión interesante. Según sus investigaciones, lo más fácil es imponer una sonrisa al interlocutor. Nada le afecta tanto como una sonrisa: ni fruncir las cejas, ni «agachar» los labios. Incluso si una persona está de humor agresivo hacia ti, tu sonrisa le desarmará y le hará cambiar su ira por piedad.
Establecer contacto visual
Estará de acuerdo en que cuando una persona evita su mirada durante una conversación, parece que no le interesa en absoluto. Por lo tanto, no dude en mirar a su interlocutor a los ojos. No te distraigas y no centres tu mirada en otra cosa, de lo contrario la persona pensará que estás aburrido. Sin embargo, los psicólogos creen que a veces es necesario apartar la mirada (aproximadamente cada 11 segundos), ya que de lo contrario surgirá una sensación de ansiedad.
La única excepción a las reglas es cuando el interlocutor tiene estrabismo o algún otro problema. Aquí es mejor mirar, por ejemplo, a la boca o a la nariz.
Vestir de forma adecuada a la situación
En 2013 se realizó un estudio en el que participaron 300 personas. Según los resultados, la gente sigue percibiendo mejor a una persona pulcramente vestida con un bonito traje, que a alguien con aspecto descuidado. Es decir, la expresión «conocer por la ropa» sigue siendo relevante hoy en día.
En la elección de la ropa y los accesorios hay que atenerse a tres sencillas reglas:
- Absolutamente todos los artículos deben coincidir con el entorno. Si usted va a una reunión de negocios, pantalones cortos y una camiseta 100% será inapropiado. Del mismo modo, un traje de negocios no será apropiado para una fiesta en un club nocturno.
- Comodidad. Es poco probable que se sienta cómodo y confiado si se frota los pies con zapatos nuevos. Recuerde esto.
- Pulcritud. Esto es especialmente cierto en el caso de los zapatos. No olvide que la gente suele mirar al suelo. Eso significa que los zapatos deben estar limpios.
La imagen es mejor pensar de antemano. Por ejemplo, las mujeres pueden recoger una falda o un vestido de longitud adecuada, así como la profundidad deseada de escote. Los hombres, por su parte, pueden preocuparse de los accesorios, como elegir un reloj o una corbata.
Mostrar sentido del humor
No hace falta hacer bromas a diestro y siniestro. Recuerda que cada uno tiene su propia opinión sobre lo que es gracioso y lo que no. Y pueden diferir. Esto puede ponerte en una situación incómoda y hacerte quedar, cuanto menos, en ridículo.
Una persona que tiene un sano sentido del humor parece natural. Sus bromas son sinceras y siempre provocan una sonrisa. Al mismo tiempo, no pueden calificarse de «planas» o ambiguas.
Hacer que una persona se interese
Causar una buena impresión ayudará y los temas de conversación correctamente seleccionados. Es poco probable que una mujer se interese si el interlocutor masculino le cuenta los resultados del partido de fútbol de ayer. Y, por el contrario, un hombre se aburrirá, escuchando sobre ir de compras con amigas o lindo rescatado del gatito calle. Por lo tanto, hablar de lo que sin duda será de interés para un nuevo conocido. Que sea algún hecho interesante, música, cine, libros, etc.
Atención. Nunca te permitas hablar de creencias y valores religiosos de forma grosera y despectiva.
Dé a la gente la oportunidad de hablar de sí misma
Según varios estudios, a la gente le gusta mucho hablar de sí misma. No, no cuentan a diestro y siniestro sus secretos más profundos. Más bien, les gusta compartir sus experiencias vitales. En ese momento activan el trabajo del área cerebral que los expertos denominan zona del placer. En uno de los experimentos, los sujetos incluso renunciaron a recompensas materiales para hablar de sus personas favoritas.
Teniendo en cuenta lo anterior, en cualquier conversación, dé al interlocutor la oportunidad de expresar su opinión. Haga preguntas capciosas. Presta atención a todo lo que se dice.
Encuentre puntos en común
El libro «La Ciencia de la Comunicación» compara los pensamientos con pelotas, y los temas comunes de conversación — con cuerdas. En el papel de estos últimos están las preguntas. Pueden ser sobre conocidos comunes, un evento al que se asiste e intereses. Así, por ejemplo, puede elogiar a una persona por la elección correcta de su restaurante de vacaciones. O, si has visto fotos de sus vacaciones, pregúntale qué es lo que más le ha gustado de ellas.
Recuerde que todas sus preguntas deben ser abiertas. Si sólo respondes «sí» o «no», la conversación acabará pronto.
Sea usted mismo
No intentes parecer diferente. De lo contrario, tendrás que dedicar mucho tiempo y esfuerzo a mantener una imagen falsa. Y al fin y al cabo, los que te rodean descubrirán fácilmente el engaño y es poco probable que lo perdonen.
No presuma
Esto es especialmente cierto cuando te relacionas con personas influyentes o famosas. Tampoco debe hablar constantemente de sus éxitos y logros.
No se olvide del nombre
¿Cuántas veces no se dirige directamente al interlocutor porque no recuerda su nombre? Si esto le ocurre con regularidad, preste atención a una serie de consejos:
- En cuanto conozcas a alguien, mírale a los ojos e intenta recordar su color.
- Piensa en alguna asociación, por ejemplo, con un personaje de película o una flor.
- Acuérdate de un conocido que se llame igual.
- Unos minutos después de conocer a la persona, menciona su nombre en una conversación.
No olvides llamar a la persona por su nombre: así le inspirarás confianza y demostrarás que te importa.
Consejos importantes
Por último, algunos consejos más sobre cómo causar una buena impresión:
- Cuida tu postura, no frunzas el ceño, no te distraigas. Esto se aplica incluso si estás hablando con un viejo amigo.
- Cuida también tu forma de hablar. No debe haber jerga, palabras malsonantes o de doble sentido.
- No hables demasiado, de lo contrario el interlocutor se aburrirá.
- No te olvides de la higiene. Se trata de la frescura del aliento y la limpieza del cuerpo. La conversación no será productiva si hay un olor desagradable a sudor o aliento.
- Si acudes a una cita, no debes hablar de tu ex pareja. Así demostrarás que sigues pensando en él.
Si en algún momento te das cuenta de que esa persona te desagrada, termina la conversación y vete. No debes forzarte a seguir comunicándote. Ambos os sentiréis incómodos y la persona se dará cuenta de la falta de sinceridad.
Mi experiencia
Hace unos 15 años yo era muy tímida y casi nunca hacía conocidos. Me resultaba difícil acercarme a una persona o incluso simplemente mostrar atención a alguien en una gran empresa. Todo cambió cuando leí el libro de Dale Carnegie «Cómo ganar amigos e influir sobre las personas». En él se enumeraban la mayoría de los consejos anteriores.
Estos consejos me ayudaron a dejar una buena impresión de mí mismo:
- mencionar con frecuencia el nombre de la persona con la que hablas en la conversación;
- establecer contacto visual;
- Mostrar un interés genuino por lo que me están contando;
- dar a la persona la oportunidad de hablar de sí misma.
Cuando en el segundo encuentro la gente veía que recordaba detalles de su vida, siempre se quedaba gratamente sorprendida.
La imagen adecuada también me ayudó a superar la timidez y a tener confianza en mí mismo. A día de hoy, sigo intentando llevar ropa cómoda y adecuada para el evento. Me di cuenta de que si algo me aprieta o me presiona, no podré participar plenamente en una conversación. Todos mis pensamientos estarán en la incomodidad.
Lo más importante es que siempre intento ser yo misma. No tengo miedo de expresar mi opinión, de participar en debates, de hacer preguntas. Si no entiendo algo, no intento demostrar lo contrario, sino preguntar sobre lo que me interesa.
Conclusión
Así pues, es difícil sobrestimar la influencia de la primera impresión en la comunicación posterior. Pero, ¿cómo dejar una buena impresión en los primeros 7 segundos de contacto? Es sencillísimo: no intentes parecer alguien que no eres, muestra sinceridad e interés genuino por el interlocutor. Y, por supuesto, no te olvides de la sonrisa y del nombre de la persona.
Fecha de publicación: 11-16-2023
Fecha de actualización: 11-16-2023