El método de Cicerón: cómo memorizar información

¿Cómo se memoriza la información? Alguien lee una y otra vez lo que está escrito y luego intenta volver a contarlo. Otros, para no perderse detalle, se aprenden el texto de memoria. En ambos casos, requiere mucho esfuerzo y tiempo. Prueba el método de Cicerón. Este método de memorización ayudó a muchos grandes oradores de la antigüedad a pronunciar discursos sin utilizar notas. Tú puedes llegar a ser como ellos.

Un poco de historia

Cicerón

El método de Cicerón, esta técnica de memorización no recibió su nombre en honor del autor, como mucha gente piensa. Aunque el célebre orador la utilizaba activamente. Basta recordar cómo pronunciaba largos discursos sin utilizar notas.

Según muchos científicos, la metodología se remonta mucho más atrás. Se cita como prueba una leyenda de los tiempos de la Antigua Grecia. Durante una de las fiestas, el tejado de un edificio se derrumbó, sepultando bajo él a un gran número de personas. El poeta Simónides logró escapar. Los inconsolables familiares de las víctimas le pidieron que les dijera dónde se encontraban sus seres queridos en el momento del derrumbe. Esta información les ayudaría a encontrar los cuerpos.

Simónides

Para su sorpresa, Simónides les dio la ubicación de todos los presentes. Conocía bien la habitación. Por lo tanto, todo lo que tenía que hacer era recordar lo que la persona había estado haciendo en los últimos minutos de vida. Esto le ayudó a dar las coordenadas exactas.

Lo ocurrido hizo reflexionar al poeta sobre la forma descubierta de recordar información importante. Le impresionó tanto que se propuso mejorarla.

Hoy en día, la técnica tiene varios nombres. Uno de ellos es el método de la habitación romana. Es adecuado para aprender un grupo de palabras, textos extensos, un horario diario o de trabajo, una lista de reuniones o llamadas telefónicas, etc.

Cuál es la esencia del método

Método de la sala romana

Gracias al método de memorización de Cicerón, podrá memorizar no sólo palabras y frases sueltas, sino un texto entero. Imagina una de las habitaciones de tu casa o piso. Coloca las palabras a su alrededor en un orden determinado. Que sea en el sentido de las agujas del reloj. Después, cuando necesites recordar la información, imagínate la habitación. Esto es exactamente lo que hacía el gran orador. Colocaba lo que tenía que decir dentro de los límites de su casa. Y después, simplemente visualízalo.

Antes de «ordenar» la información, familiarízate con la habitación en la vida real. Pasea por ella, intenta recordar dónde y qué elementos se encuentran. La forma más fácil de hacerlo será en tu despacho, si tienes uno.

Se recomienda utilizar sólo los objetos que estén siempre en el mismo lugar. Puede tratarse de cortinas, muebles, cuadros, barras de cortinas, ventanas o alféizares. Coloca las palabras de izquierda a derecha y de arriba abajo. Por cierto, no sólo puedes utilizar habitaciones separadas. Un piso entero, casas de amigos y conocidos, calles de la ciudad servirán. Lo principal es conocer bien la habitación o el recorrido.

Las asociaciones ayudarán a relacionar los objetos situados en la habitación con el texto memorizado. Relacione las palabras y frases con la secuencia ya aprendida. Al principio, haz una lista de objetos. Esto te ayudará a no confundirte.

La lista está lista. Ahora estudia detenidamente los objetos que se interpondrán en tu camino. De lo contrario, en el proceso de dominar la técnica, usted pensará, con cuál de ellos es mejor asociar la información. Esto le llevará a cometer errores.

Atención. Puede utilizar las mismas premisas para memorizar información relacionada lógica y temáticamente. En este caso, los datos no se mezclarán. Simplemente recordarás lo que necesites en ese momento.

Con la ayuda de la mnemotecnia del método Cicerón es conveniente memorizar los números. Sin embargo, para empezar, hay que convertirlos de una forma abstracta a una concreta. Después de los números transformados en cualquier objeto debe ser colocado alrededor de la habitación. No empiece con uno, sino con dos a la vez. Para que sea más fácil, únelos mediante asociaciones. Cuando aprendas a hacerlo, enlaza 4 o incluso más cifras.

La técnica de memorización según el método de Cicerón es adecuada para los niños.

Algunas recomendaciones

concentración de la atención

No es difícil dominar la memorización según el método de Cicerón. Para acelerar el proceso, utiliza sencillos consejos:

  1. Practica con regularidad, de lo contrario perderás destreza. Entrenar con regularidad mejorará el rendimiento.
  2. Sé absurdo. Suena extraño, pero realmente funciona. He aquí un ejemplo. Imagina que tienes que hacer una presentación sobre un proyecto importante. En la parada del autobús, ves al presidente con un periódico en la mano. La portada del periódico tiene impresa parte de tu informe. Subes al autobús y hay otra parte del texto. Sólo que esta vez está rayado en el respaldo del asiento de enfrente. Y así sucesivamente.
  3. Cambia el tamaño de las imágenes de la habitación. Por ejemplo, enlaza un mueble con un gato. Deja que el animal crezca hasta alcanzar el tamaño de ese mueble.
  4. Concéntrate en el color y la dinámica de los objetos. Si pintas el mismo armario de rosa brillante y lo haces oscilar como un péndulo, será mucho más fácil de recordar.
  5. Cuando utilices el método de Cicerón, pon en marcha tus sentidos. Presta atención a los olores.

Y por último, el consejo principal. Ya se ha mencionado anteriormente. Antes de empezar a trabajar, pasea por la habitación o por tu ruta favorita. Esto te ayudará a recordar la ubicación de los objetos y sujetos.

Conclusión

El método de Cicerón es una forma inusual pero eficaz de memorizar una gran cantidad de información. Y no importa lo que sea: texto o números. Domine el arte de hacer asociaciones. Y entonces serás capaz de reproducir fácilmente un informe ante oyentes o una compleja secuencia de números.

Fecha de actualización: 11-16-2023