Divorcio en presencia de hijos comunes — a menudo un proceso confuso, difícil, psicotraumatizante. Los documentos están firmados, la familia se ha mudado a diferentes direcciones, ex cónyuges comienzan a llevar una nueva vida, libre de la participación y la presión de la otra.
Sin embargo, en presencia de hijos comunes, es imposible quemar completamente los puentes con la ex pareja. De los copadres se requiere sabiduría, prudencia, paciencia. Para la comodidad de los niños, es necesario ser capaz de poner los intereses de una hija o hijo por encima de sus propias necesidades, ambiciones, experiencias.
Tenga en cuenta las recomendaciones de los psicólogos, cómo sobrevivir a un divorcio en presencia de un niño con las menores pérdidas.
Tabla
- ¿Qué sienten los ex cónyuges?
- ¿Cómo sobrevivir a la separación de la pareja en presencia de niños pequeños?
- ¿Cómo aceptar la situación cuando te quedas solo?
- ¿Cómo recuperarse y seguir con su vida?
- ¿Cómo mantener el sentido común?
- Los errores de los adultos y sus efectos psicológicos en los niños
- Vídeo sobre el tema del artículo
- Conclusión
¿Qué sienten los ex cónyuges?
Cuando se piensa en el entorno ideal para criar a los hijos, viene a la mente el modelo de dos padres amorosos. Pero en la realidad, muchos matrimonios se desmoronan.
Los co-padres se ven obligados a construir una nueva vida adaptada a la necesidad de criar a los hijos viviendo en dos hogares. Surgen nuevas reglas que exigen pensar y actuar de forma diferente.
Tras el divorcio, el comportamiento de los ex cónyuges se ve influido por las emociones y sentimientos que surgen de forma natural cuando se rompe una relación.
¿Qué siente un hombre?
Un hombre divorciado rara vez recibe apoyo de los demás, sobre todo si es el iniciador de la separación.
Si se acepta el apoyo de la mujer abandonada, lástima, el hombre se queda solo con pensamientos, preocupaciones . Probablemente, él asumió que la vida va a cambiar después del divorcio. Pero asumir y hacer frente a los cambios en la práctica — cosas diferentes.
En un matrimonio, la vida está estructurada de una determinada manera. Las responsabilidades domésticas se dividen o recaen sobre los hombros de la mujer. Tras el divorcio, el hombre tiene que gestionar el hogar por su cuenta. Se sorprende al descubrir que la comida no se cocina sola, que no se añaden productos al frigorífico, que la montaña de platos no disminuye. La privación de la comodidad habitual saca al hombre de su rutina, le vuelve irritable y menos eficaz en el trabajo.
A menudo, tras un divorcio, el ex marido debe trasladarse a otro lugar. Mudarse crea molestias, priva de tranquilidad, causa estrés. Por ello, el ex cónyuge tras la ruptura familiar suele sentirse «fuera de lugar». Actúa de forma ilógica, caótica, le irrita la necesidad de organizar el hogar.
Si la iniciadora de la separación fue una mujer, las experiencias del hombre están llenas de dramatismo. La decepción, la sensación de pérdida, el resentimiento, el arrepentimiento por sus propios errores, la amargura por el tiempo perdido, el anhelo de tener hijos cubren el mundo emocional del hombre.
Al no poder llorar ni hablar, el hombre desplaza la experiencia a lo más profundo del subconsciente. Las emociones reprimidas y no procesadas dan lugar a enfermedades psicosomáticas, abuso del alcohol, adicción al juego.
Sentimientos de una mujer
La etapa posterior a la disolución del matrimonio es un periodo de caos emocional. La mujer divorciada quiere averiguar por qué se rompió la familia, encontrar a los culpables, vengarse del agresor o castigarse a sí misma. Busca demostrar a su ex marido que se equivocó, convencer a los demás de su vileza, de su inhumanidad.
En presencia de hijos comunes, la relación no puede completarse. A menudo crean un cierto fondo mental irresistible. La mujer vive en el pasado, no en la realidad, no piensa en el futuro.
La ex mujer suele adoptar una postura beligerante-odiosa. Hace todo lo posible para envenenar, complicar la existencia de la ex pareja.
Otras mujeres toleran con calma la ruptura, no entran en pánico, no organizan histerias. Actúan adecuadamente por el bienestar de los niños. Las terceras caen en la desesperación, pensando obsesivamente: «¿Quién necesita a una divorciada, y encima con un hijo?». Baja autoestima, inseguridad, miedo a la soledad: características típicas de una mujer después del divorcio.
¿Cómo sobrevivir a la separación de la pareja en presencia de niños pequeños?
La transición de una familia completa a dos vidas separadas suele ser incómoda, molesta y psicotraumatizante. Es importante que la ruptura de la pareja sea más suave, indolora para los miembros de la familia rota.
Un obstáculo típico para el éxito de la crianza, el desarrollo de los niños después del divorcio es el enfoque de los padres en el conflicto y la defensa de los intereses personales.
Para que la cooperación tenga éxito, los ex cónyuges deben aprender a desarrollar y utilizar estrategias de gestión de conflictos. De lo contrario, el niño se convertirá en el centro de los procedimientos de los adultos. Esto provoca trastornos a corto plazo y problemas de salud mental a largo plazo para el niño pequeño o el adolescente.
Las peleas prolongadas, las ofensas fuertes entre los copadres crean un ambiente negativo e incómodo. Socavan los intentos de establecer un modo de vida estable para el pequeño. Los conflictos continuados convierten a los antiguos miembros de la pareja en malos modelos de habilidades sociales y de comunicación.
La hostilidad obliga a los copadres a actuar unos contra otros en lugar de trabajar juntos. A menudo, los adultos utilizan a los niños como mensajeros de malas noticias.
Dejen a un lado las diferencias y discutan cuáles serán las nuevas normas, límites, recompensas y castigos. Mamá y papá deben esforzarse por mantener una línea de crianza sensata. Mantengan la coherencia para que los niños sepan que hay rutinas, tareas programadas y citas.
Los adultos deben mantenerse en contacto para saber qué ocurre en la vida diaria de su hija o hijo. Sin embargo, las llamadas no deben servir para controlar, hacer un seguimiento de un ex cónyuge.
El reto para los copadres es encontrar la manera de interactuar entre sí en el contexto de una relación comercial. Esto permitirá elevarse por encima de las emociones primitivas, para centrarse en los intereses del niño. El hábito de pensar con lógica, de actuar con coherencia para el futuro heredero ayudará a los ex cónyuges a redescubrir su fuerza interior, a superar los sentimientos destructivos. El camino hacia la paz y la armonía con uno mismo es intentar ser lo mejor para uno mismo y para los hijos.
A veces existe la tentación de culpar al segundo progenitor de los problemas, de los cambios en el comportamiento de los hijos. No cedas al impulso, a reaccionar bruscamente ante pequeños obstáculos, a sacar conclusiones precipitadas. Es necesario estudiar la situación desde todos los ángulos, valorar la importancia de lo que está ocurriendo.
Si hay sospechas de que la ex pareja trata al niño de forma incorrecta, se comporta de forma indigna, no le presta la atención requerida, no se puede hablar de este tema de forma hostil. Exprese las quejas con calma, sin afectar a la personalidad , presente las reclamaciones como una preocupación por el bebé. Formule específicamente las preguntas necesarias. No critiques el carácter, los hábitos de la otra persona, no pongas como ejemplo errores del pasado. Céntrese en el presente y piense en el futuro.
¿Cómo aceptar la situación cuando te quedas solo?
Qué hacer para sobrevivir a la separación:
Para un hombre
La ruptura de una relación provoca sentimientos dolorosos y preocupantes. Un divorciado puede lamentar el fin de la unión, sentirse confuso, aislado del niño y temeroso del futuro. La tarea del ex marido es aprender a lidiar con el dolor del divorcio de manera saludable, para mantener la calma, para ayudar a los niños se sientan cómodos y tranquilos.
Consejos psicólogos, cómo un hombre para sobrevivir a un divorcio, minimizando la angustia mental, se enumeran a continuación:
- Hacer ejercicio diario, preferiblemente al aire libre. El ejercicio activo alivia el estrés acumulado, devuelve la energía. El ejercicio estimula el cerebro, lo que le permite tomar decisiones sensatas.
- Siga una dieta sana. Aunque cocinar en casa sin la ayuda de su ex cónyuge requiere más esfuerzo que pedir comida preparada en un restaurante o comprar alimentos precocinados, acostumbrarse a comer regularmente alimentos frescos, sanos y cocinados en casa le sacará de las garras del abatimiento y evitará enfermedades.
- Visite con frecuencia a sus amigos, amplíe su círculo social. Tras el divorcio, los hombres suelen caer en la tentación de pasar desapercibidos, aislarse, evitar los encuentros con compañeros y antiguos familiares. Pero la realidad es que la plena interacción social es importante para superar el estrés del divorcio, la supervivencia durante el periodo de adaptación a la soledad. Sin embargo, socializar no implica necesariamente la necesidad de «confesarse» con los amigos. Hay que pedir a los interlocutores que eviten el tema de la separación.
- Confíe en la ayuda de amigos sabios. Con un psicólogo o una persona autorizada, hable de experiencias desagradables, pensamientos agobiantes. Deshacerse de la amargura, la ira, la frustración de forma constructiva evitará la liberación de emociones negativas en los niños.
- Siga disfrutando de la vida, alégrese, diviértase, ría. Intente introducir el humor y el juego en la vida de los niños. Los paseos conjuntos, las actividades de ocio emocionantes, los viajes reducirán el estrés, eliminarán la tristeza y la ira, devolverán el sentido a la vida.
- Trabaje con la ex mujer. Los conflictos entre los padres son destructivos para los niños. No dejes que tu hija o hijo piense que tiene que elegir entre sus padres. Nunca discutas en presencia de los niños, ya sea en persona o por teléfono. Si percibe resentimiento por parte del ex cónyuge, ofrézcase a reprogramar la conversación.
- Tenga tacto y sea educado. No comente detalles del comportamiento del ex cónyuge con el niño. Céntrese en los puntos fuertes de los miembros de la familia. Anime a los niños a hacer lo mismo. Dé prioridad a establecer una relación amistosa con la ex mujer. Una actitud amistosa calmará a los niños y les enseñará a resolver los problemas de forma constructiva.
- Evite los malos hábitos. No te quedes en el sofá comiendo patatas fritas y bebiendo cerveza. No intentes eliminar el malestar interno con alcohol, drogas, relaciones sexuales promiscuas, juego.
- No haga intentos de restablecer relaciones o crear instantáneamente una nueva familia. Los psicólogos recomiendan dedicar un año después del divorcio a la recuperación. Concédase tiempo para sentirse seguro, tranquilo y activo.
- Evite culparse. No se culpe por la ruptura de la familia, porque ambos miembros de la pareja tienen la culpa de la mala relación. No sólo el ex marido es el culpable de los problemas, sino también la ex cónyuge. No dejes que tus propios pensamientos de menosprecio bajen tu autoestima.
- Mantente abierta a la realidad. No esperes cambios globales. Si el ex cónyuge es una mujer maleducada y controladora, no cambiará a mejor después del divorcio. Céntrese en una evaluación objetiva: tenga en cuenta tanto los recuerdos positivos como las experiencias negativas.
Mujer
Si una mujer divorciada se encuentra enzarzada en una batalla con su ex pareja, debería detenerse y darse cuenta del verdadero propósito de la vida. Recuérdese a sí misma que lo mejor para los hijos a largo plazo es tener una buena relación con ambos progenitores.
A continuación se exponen los pasos a seguir para aceptar y sobrevivir a un divorcio:
- Piensa en el futuro para mantener la calma en el presente. Si te centras en objetivos a largo plazo y das prioridad a la salud física y mental de los niños, podrás evitar desacuerdos con tu ex marido por detalles del día a día.
- Despeja el espacio personal. En cualquier casa se acumulan cosas que recuerdan a su ex marido. Hay que deshacerse de los recordatorios desagradables. Tómate tu tiempo para repasar tu armario y decidir qué prendas te quedarán mejor con tu nuevo look. Tire a la basura o regale a los necesitados el resto de cosas que le recuerdan el pasado.
- Pasa tiempo con tus hijos. Una mujer soltera suele sentirse abrumada por las tareas cotidianas, por lo que se pierde la visión global de la vida. Permítase relajarse, jugar a un juego de ordenador con su hijo, hacerle la manicura a su hija. Los niños aprecian más los momentos divertidos y agradables que un sabroso desayuno o una camisa planchada.
- Organizar las finanzas. Tras el divorcio, la mujer es personalmente responsable del presupuesto. Independientemente de su papel financiero durante el matrimonio, una mujer divorciada tiene que gestionar las facturas, planificar los ingresos y los gastos y asignar fondos a distintos fines. Tómese su tiempo para aprender los entresijos de la elaboración de presupuestos.
- Hacer del perdón una prioridad. Si una mujer es incapaz de perdonar a su ex cónyuge o se culpa a sí misma, no podrá seguir adelante. El resentimiento, la ira y la frustración en el corazón son obstáculos para la felicidad. Encuentre la manera de perdonar sinceramente, entonces una vida plena y satisfactoria volverá más rápidamente.
- Céntrate en tu bienestar personal. El tiempo después del divorcio es el momento de cuidar tu cuerpo. Hágase un chequeo médico completo, visite al dentista, tome las medidas preventivas y curativas necesarias. El ejercicio diario y una dieta equilibrada son importantes. Con una salud excelente, los problemas parecen menores.
- Mira en tu interior. Después de separarte de tu marido, tómate tiempo para intentar comprender tu verdadero yo. La libertad abierta asusta, pero el tiempo de soledad forzada puede dedicarse al desarrollo, a la transformación de su propia personalidad. Después del divorcio hay tiempo y propósito para abandonar los malos hábitos y realizar actividades que aporten alegría. No busques un nuevo pretendiente para llenar el espacio vacío de tu corazón. El espacio vacío de tu corazón debe llenarse con autocuidado.
- Acoge una relación positiva entre tu ex marido y tus hijos. Los niños no tienen la culpa de la ruptura; ellos no pidieron el divorcio. Un cambio no deseado es difícil para la psique de los niños. Es importante trabajar para que las interacciones entre los miembros de la familia rota sigan siendo cariñosas, cálidas y civilizadas.
- Revelar las verdaderas preferencias personales. Cuando una mujer forma parte de una pareja, muchas decisiones las toma el marido. Recuerde sus aficiones antes de casarse, pruebe cosas nuevas, descubra el mundo en el que es feliz.
¿Cómo recuperarse y seguir con su vida?
Los copadres y los hijos deben entender claramente las reglas y peculiaridades de la nueva vida tras el divorcio de la pareja. La reacción a las innovaciones varía en función de la edad, el temperamento, las peculiaridades del carácter de cada miembro de la familia rota.
Los adolescentes suelen resistirse a los cambios repentinos en la situación familiar a la que están acostumbrados. Los niños en edad preescolar son demasiado pequeños para analizar y evaluar los acontecimientos, por lo que su actitud ante la ruptura familiar refleja la opinión y el comportamiento de los adultos.
La regla principal para construir la estrategia correcta de comunicación tras la separación es tener en cuenta las peculiaridades del niño, ser capaz de anticipar su reacción y actuar según un plan claro.
Benevolencia, calma, sabiduría: aliados para una rápida recuperación tras el divorcio. Seguir unos sencillos consejos evitará el agotamiento nervioso, la apatía, la depresión y otros problemas de salud mental:
- Para sobrevivir sin dolor a la separación, los ex cónyuges deben guiarse por el principio: sus mutuos agravios, resentimientos, quejas no deben convertirse en un obstáculo para una vida plena en el presente y la construcción del futuro. Es importante que todos los miembros adultos y pequeños de la familia sepan que sus seres queridos están siempre disponibles y que les prestarán ayuda en caso de emergencia. Entender que una ex pareja, padre o hijo no es un enemigo, sino un amigo, aumenta las posibilidades de una comunicación plena, evita la posibilidad de crisis nerviosas y minimiza el riesgo de errores.
- Los intereses de los niños deben estar en primer lugar, por lo que los padres deben escuchar a su hija o hijo. Preste atención a lo que dicen y cómo lo dicen, a cómo actúan. Si el niño se comporta con inquietud, pregúntele correcta y amablemente por sus sentimientos. Muestre empatía, intente ver la situación desde el punto de vista de la otra persona antes de tomar decisiones o emitir juicios.
- Para superar un divorcio sin dolor, hay que animar a los niños a desarrollar relaciones sólidas con cada miembro de la familia. A veces los niños prefieren la compañía del otro progenitor. No saque conclusiones precipitadas. Recuerde que los niños pasan por diferentes etapas de desarrollo, se llevan mejor con mamá o papá a una edad determinada.
- Una condición importante es la coherencia en la crianza. Un ex cónyuge puede ser tolerante con ciertas actividades cuando el otro está en contra de ellas. En cuanto ambos progenitores adopten una postura unificada, digan un «no» firme, el niño dejará de chantajear y amenazar con «papá lo permite, yo le haré caso a él, no a ti». Un entendimiento común de las prohibiciones y lo permitido ahorrará a los copadres momentos desagradables, preocupaciones innecesarias. Recuerda que los niños perciben los mensajes verbales y el lenguaje corporal de forma diferente a los adultos. Interpretan literalmente lo que ven y oyen.
- Tome decisiones como madre o padre, no como marido y mujer divorciados. Independientemente de los sentimientos de ira, resentimiento o depresión por el divorcio, evita aumentar la tensión entre los miembros de la familia rota. Un problema típico es que los padres se sumergen tanto en sus propios sentimientos que se olvidan del niño. Se quedan atrapados en el resentimiento por ver a la otra persona como un enemigo o un ser con defectos. Un veredicto así deja al niño desorientado.
¿Cómo mantener el sentido común?
Los padres suelen perder de vista que están disolviendo el matrimonio, no separándose de los hijos. Para no cometer errores en el divorcio, es necesario recordar: serán coorganizadores, consejeros, mentores, educadores de hijas e hijos.
Cuando los adultos se dan cuenta de que, a largo plazo, tienen que participar en la vida escolar, las fiestas de cumpleaños y las graduaciones del niño, se sienten motivados para cooperar con normalidad.
Una buena cooperación entre ex cónyuges e hijos implica la comunicación de información importante, interés y atención a los problemas de los demás. Deben tenerse en cuenta las consecuencias de las palabras y los actos, ya sean intencionados o no. Es necesario asegurarse de que se tienen en cuenta los deseos y necesidades de los demás.
La forma de asegurarse de que no hay sabotaje es preguntarse a sí mismo: «¿Qué resultado quiero obtener de la comunicación?». Si la respuesta no implica la idea de «quemar completamente los puentes», el ex cónyuge se abstendrá de groserías, críticas, acusaciones.
Para no cometer errores irreparables, es necesario actuar con la idea de que el bienestar de los hijos es la principal prioridad . La sabiduría implica que una persona es consciente de los probables efectos a largo plazo de sus palabras y acciones sobre la salud mental del pequeño.
Los errores de los adultos y sus efectos psicológicos en los niños
Tras el divorcio, los ex cónyuges suelen construir un modelo incorrecto de interacción entre ellos y los niños. A continuación se describen los errores típicos de las ex parejas y sus consecuencias.
Problema : Los adultos no escuchan y no oyen a los niños. Al explicar las relaciones, se olvidan de las preocupaciones, problemas, dificultades e inquietudes de los niños y adolescentes. No animan a los niños a hablar abiertamente de sus pensamientos, deseos y estados de ánimo. Están seguros de que a los hijos no les pasa nada, a pesar de que no intentan obtener pruebas.
Consecuencia : Sentirse «no deseado», baja autoestima. Intentar obtener la atención de los padres de forma no funcional (por ejemplo, a través de síntomas de enfermedad). Intentar encontrar atención para su propia personalidad entre sus iguales, uniéndose a grupos juveniles antisociales.
Problema : El padre divorciado intenta borrar el pasado. Está preocupado por construir el futuro, descuidando los sentimientos del heredero. No le interesa que el niño mantenga una relación sólida con su ex pareja.
Consecuencia : El hijo se siente superfluo para el progenitor con el que vive. El adolescente empieza a desafiar, se niega a cumplir las justas exigencias del adulto, actúa «por despecho» contra la voz de la razón. El joven o la joven pierde interés por los estudios, los deportes, las aficiones. El adolescente hace intentos de acercarse a otro progenitor, se comporta de forma demostrativa e ingenua.
Problema : Echar barro sobre el ex cónyuge. Intentos de que los hijos tomen partido. Culpar, ridiculizar, criticar a la otra persona al alcance de los niños. Utilizar a los niños y adolescentes para cabrear al ex.
Investigación : Aceptación de la acusación o del acusado. Dependiendo de la elección de la «figura de autoridad», el niño muestra falta de respeto, desprecio por el otro progenitor. El perfil de personalidad del adolescente cambia. Se vuelve grosero, hostil, conflictivo. Surgen problemas en los colectivos de niños. Criado en un ambiente de acusaciones infundadas y de humillación de los demás, el niño se convierte en el instigador del acoso, inicia el acoso de los compañeros débiles.
Problema : Mensajes abiertos o insinuaciones con el contexto de que el niño es responsable del divorcio de los padres.
Consecuencia : Desarrollo de trastornos depresivos. En la adolescencia, las ideas de culpabilidad son la causa de comportamientos suicidas. La autoestima del joven o de la joven sufre considerablemente. Una persona convencida de su propia culpabilidad no tiene éxito en la vida porque está convencida de que carece de capacidad para llevar a cabo un proyecto que merezca la pena.
Problema : Ocultar información. Ocultar acontecimientos significativos o cuestiones importantes a los chicos.
Consecuencia : El niño se encierra en sí mismo, se niega a socializar con sus compañeros. Sus esfuerzos se dirigen a encontrar en su propia personalidad rasgos que puedan explicar la desconfianza de los padres.
Vídeo sobre el tema del artículo
Cómo vivir después del divorcio, si hay un niño, incitará el vídeo:
Conclusión
El divorcio en presencia de hijos comunes requiere sabiduría, conocimientos psicológicos, paciencia y resistencia. No se deben tomar decisiones precipitadas, poner al niño en contra del otro progenitor, limitar la comunicación.
El niño, independientemente de su edad — un miembro de pleno derecho de la familia, que tiene derecho a una opinión personal, la consideración de sus intereses, la atención, el cuidado.
Si no es posible organizar de forma independiente la vida tras la separación, hay conflictos con la ex pareja o con el hijo, es aconsejable buscar ayuda psicológica cualificada.
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Fecha de publicación: 11-16-2023
Fecha de actualización: 11-16-2023