Según la OMS, los trastornos depresivos representan alrededor del 40% de todas las patologías mentales. En sentido figurado, la depresión se denomina «la enfermedad del tercer milenio».
Actúa como trastorno independiente o como consecuencia de otras enfermedades mentales y somáticas más graves.
Esta patología no perdona a nadie. La padecen personas de distintos estratos sociales. Pero son especialmente susceptibles de sufrir trastornos depresivos las mujeres debido a diversas circunstancias.
Tabla
¿Cómo sospechar?
Muchas personas no tienen un concepto claro de la depresión, confundiéndola con decaimiento temporal o mal humor. Sin embargo, la depresión clínica es un estado psicopatológico complejo a largo plazo que consiste en sentimientos negativos, alteraciones de la percepción y de los procesos cognitivos. A menudo, en el trasfondo del trastorno se añaden enfermedades somáticas.
Desde el punto de vista psicológico, la enfermedad se caracteriza por un estado de ánimo bajo, pesimismo, autoestima negativa, mala actitud ante su pasado y su futuro.
Sinopsis Las emociones son la base de la integridad de la personalidad de una persona. La hipotimia (bajo estado de ánimo) prolongada puede conducir a la pérdida del sentido de la vida y de la existencia humana.
Una mujer deprimida está siempre triste y vulnerable. No puede alegrarse de verdad. Cualquier toma de decisiones se convierte en un gran problema . Uno de los criterios psicológicos importantes es la pérdida del sentido de su valor y los pensamientos pesimistas. Este estado dura meses y a veces años.
Causas del desarrollo
La predisposición a los trastornos depresivos viene determinada por una serie de factores, entre los que son importantes la edad, la herencia y los antecedentes hormonales.
Los factores endocrinos aumentan la vulnerabilidad de las mujeres a la depresión. Así, no es raro que los médicos se encuentren con depresiones prenatales, posparto y menopáusicas, que se producen durante el periodo de reestructuración hormonal del organismo.
A menudo el trastorno se produce tras la extirpación de los ovarios.
Los factores que intervienen en el desarrollo de la forma clásica del trastorno depresivo son los procesos naturales del envejecimiento y el consiguiente:
- deterioro de la salud física
- disminución de la actividad social;
- insatisfacción con la calidad de vida.
La depresión clínica se desarrolla en un contexto de:
- discapacidad;
- enfermedad de un hijo;
- problemas familiares no resueltos;
- pérdida de un ser querido;
- abuso sexual, físico o emocional;
- pérdida del empleo.
Se considera que el factor más psicotraumatizante es un acontecimiento negativo inesperado. Sin embargo, los psicoterapeutas no consideran el estrés como un desencadenante específico del desarrollo del trastorno depresivo.
Importante No hay que confundir depresión y duelo. Durante el duelo, la pena que cayó sobre la parte de la mujer es «trabajado» por los sentimientos. De vivir el duelo se puede distraer, mientras que en la depresión es imposible.
Los factores predisponentes son características psicológicas individuales de la mujer:
- Ansiedad;
- tendencia a los cambios de humor;
- baja autoestima.
La base del estado depresivo pueden ser trastornos del ciclo de sueño y vigilia, procesos patológicos en las estructuras del cerebro, un fallo en el sistema de neurotransmisores que afectan a la actividad conductual.
Signos característicos
Existen diversas variantes del curso de los trastornos depresivos. Sin embargo, los signos característicos de un estado negativo en las mujeres son:
- bajo estado de ánimo;
- letargo;
- hipodinamia;
- apatía;
- sensación de pesadez en el pecho o el abdomen
- trastornos del sueño;
- embotamiento de la experiencia emocional;
- dificultad para pensar;
- Cambios en las expresiones faciales;
- deterioro de las funciones cognitivas (atención, memoria).
A menudo la depresión va acompañada de una violación del ciclo menstrual y de los ritmos biológicos, palpitaciones (taquicardia), aumento de la tensión arterial, disminución o ausencia total de libido, trastornos autonómicos.
El aspecto de la mujer también cambia:
- Un rostro sin vida;
- un aspecto apagado, angustiado;
- postura encorvada, rigidez;
- andar arrastrando los pies;
- habla inestable y monótona.
En el curso melancólico, predominan el letargo emocional, la culpa, la tristeza, el apetito y la pérdida de peso. La mujer suele tener pensamientos suicidas.
La variante ansiosa cursa con una vaga ansiedad de fondo y una sensación de angustia inminente. Las preocupaciones por la mujer tienen un carácter sobrevalorado y se acompañan de ansiedad gratuita, hipocondría y quisquillosidad. El cuadro empeora en las horas nocturnas o bajo la influencia de factores desfavorables.
Peculiaridad La depresión de tipo ansioso aparece con más frecuencia durante la menopausia.
A veces, la depresión va acompañada de aburrimiento, irritabilidad y enfado. La mujer muestra insatisfacción consigo misma, con los demás y con la vida en general. La aparición de tales signos puede indicar enfermedades orgánicas.
¿Cuál es el peligro?
La depresión en una mujer no es sólo una experiencia agonizante. El trastorno se vuelve peligroso con la aparición de pensamientos suicidas. Cualquier problema de la vida cotidiana para estas personas tiene un carácter dramático no resuelto. La depresión prolongada conduce a la inadaptación social.
Incluso sin intentos de suicidio, las personas deprimidas tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades graves. El estado depresivo es también la causa del deterioro del proceso terapéutico de otras patologías.
El trastorno se convierte a menudo en la causa del alcoholismo y la drogadicción.
En el desarrollo de la depresión clásica se distinguen varias etapas. El trastorno comienza con un estado depresivo, y puede terminar en ausencia de tratamiento con manifestaciones depresivo-paranoides, psicosis, fase delirante de la enfermedad. En estos casos, la persona que sufre puede ser un peligro para sí misma y para los demás.
Diagnóstico y pruebas
Para hacer el diagnóstico correcto, el médico debe tener en cuenta las manifestaciones clínicas del trastorno depresivo. Además de recoger la anamnesis, establecer la causa de la enfermedad, se lleva a cabo un examen médico, que excluye patologías de los sistemas nervioso central y endocrino, así como otros factores endógenos.
Para evaluar el trastorno depresivo se utilizan las siguientes pruebas y cuestionarios :
- Escala de Hamilton . Permite evaluar el grado de gravedad de los síntomas.
- Escala de Montgomery-Asberg . Gracias a este test, el psicoterapeuta evalúa de forma rápida y precisa la gravedad del trastorno, así como la dinámica del proceso patológico.
- Test de Zung . Se permite al paciente autoevaluar su estado respondiendo a las preguntas propuestas.
- Test de Beck . Rellenado por el propio paciente, el psicoterapeuta evalúa la sintomatología.
El diagnóstico se centra en los signos típicos, las características biológicas con el fin de excluir otras enfermedades psiquiátricas y trastornos de la personalidad.
Asistencia
La base de la terapia es la corrección de los mecanismos desencadenantes del estado depresivo.
Para permitir y normalizar los procesos neuroquímicos en el sistema nervioso, se prescriben antidepresivos . La elección del fármaco y la dosis se individualizan para cada paciente.
En los casos graves, el tratamiento se lleva a cabo en un hospital psiquiátrico.
El tratamiento farmacológico y no farmacológico sólo lo prescribe un psicoterapeuta con la formación médica adecuada.
Se distinguen las principales etapas del tratamiento farmacológico
- Supresiva. Duración de 1 a 3 meses.
- Estabilizadora. Terapia durante 5-9 meses con una reducción gradual de la dosis.
- Profiláctica. El paciente es observado por un médico de 1 a 5 años.
En función de la sintomatología y de las patologías mentales concomitantes, el médico puede prescribir neurolépticos, normotimizantes, tranquilizantes, fármacos nootrópicos. Además, la terapia se lleva a cabo con medios para mejorar la circulación sanguínea cerebral, prescribir angioprotectores, aminoácidos y vitaminas. Al mismo tiempo, se tratan las enfermedades somáticas concomitantes.
Además de los fármacos, se muestran a los pacientes diversos métodos psicoterapéuticos :
- psicoterapia cognitiva
- psicoterapia conductual
- logoterapia;
- psicosíntesis;
- psicoterapia transpersonal
- psicoterapia familiar;
- PNL;
- terapia Gestalt;
- terapia de juego.
El objetivo de todos los métodos de psicoterapia es establecer una relación de confianza entre el paciente y el médico, corregir trastornos mentales, ayudar al paciente a afrontar situaciones psicológicamente traumáticas.
¿Qué está prohibido hacer?
No hay que olvidar que la depresión es un trastorno de todo el organismo, por lo que debe tratarse de forma integral bajo la supervisión de un psicoterapeuta. Cuando se produce un trastorno depresivo, está prohibido :
- tomar de forma independiente antidepresivos y otros medicamentos;
- cambiar la dosis de los medicamentos prescritos
- dejar de tomar medicamentos por cuenta propia;
- consumir alcohol y drogas.
Importante Los psicólogos sin formación médica no tienen derecho a recetar medicamentos.
Recurrir a diversos tipos de curanderos, comprar en línea «infoproductos únicos» que eliminan la depresión en pocos días, recibir asesoramiento en línea de personas de dudosa reputación como psicoterapeutas sólo puede agravar la situación.
Vídeo sobre el tema
En este vídeo se ofrece una breve información sobre la depresión femenina:
Conclusión
La depresión no debe ignorarse ni tomarse a la ligera. De este trastorno se ocupan los médicos. El diagnóstico y la terapia a tiempo, la ayuda de especialistas y personas cercanas en la superación de experiencias dolorosas ayudan a rehabilitarse rápidamente tras sucesos psicotraumáticos. Algunas mujeres, tras el tratamiento, señalan que la enfermedad supuso un punto de inflexión en sus vidas, que las llevó a cambios positivos.
¿Te ha resultado útil el artículo? Puntúalo
5 / 5. Número de valoraciones: 1
Fecha de publicación: 1-1-2023
Fecha de actualización: 1-1-2023